Diccionario
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  • Sol

    Astro del día. Dios lo creó (Gn. 1:16; Sal. 74:16; 136:8), lo mantiene y lo dirige (Jer. 31:35; Mt. 5:45; Sal. 104:19). 

    Génesis 1:16 

    16 E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas.

    Salmos 74:16 

    16 Tuyo es el día, tuya también es la noche; Tú estableciste la luna y el sol.

    Salmos 136:8

    8 El sol para que señorease en el día, Porque para siempre es su misericordia.

    Jeremías 31:35 

    35 Así ha dicho Jehová, que da el sol para luz del día, las leyes de la luna y de las estrellas para luz de la noche, que parte el mar, y braman sus ondas; Jehová de los ejércitos es su nombre:

    Mateo 5:45 

    45 para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.

    Salmos 104:19

    19 Hizo la luna para los tiempos; El sol conoce su ocaso.

    La vegetación crece, pero también se deseca bajo el calor del sol (Dt. 33:14; 2 S. 23:4; Jon. 4:8). 

    Deuteronomio 33:14 

    14 Con los más escogidos frutos del sol, Con el rico producto de la luna,

    2 Samuel 23:4 

    4 Será como la luz de la mañana, Como el resplandor del sol en una mañana sin nubes, Como la lluvia que hace brotar la hierba de la tierra.

    Jonás 4:8

    8 Y aconteció que al salir el sol, preparó Dios un recio viento solano, y el sol hirió a Jonás en la cabeza, y se desmayaba, y deseaba la muerte, diciendo: Mejor sería para mí la muerte que la vida.

    La Biblia dice que el sol se levanta, se pone, recorre el camino en su curso en los cielos (Sal. 19:4-6). 

    Salmos 19:4-6

    4 Por toda la tierra salió su voz, Y hasta el extremo del mundo sus palabras. En ellos puso tabernáculo para el sol;

    5 Y éste, como esposo que sale de su tálamo, Se alegra cual gigante para correr el camino.

    6 De un extremo de los cielos es su salida, Y su curso hasta el término de ellos; Y nada hay que se esconda de su calor.

    Estas expresiones siguen siendo usadas en la actualidad. Se ha querido mostrar como argumento en contra de las Escrituras, que presenten al sol como moviéndose en relación con la tierra. Sin embargo, esta postura es, desde el terreno de la misma cosmología, insostenible. 

    En base a la mecánica, todos los movimientos del universo son mutuamente relativos, y el punto de referencia que se tome como fijo para medir los movimientos de todos los demás objetos con respecto a este punto es totalmente arbitrario desde el punto de vista de la física. 

    Ello se debe al fracaso en el intento de llegar a probar un espacio newtoniano absoluto y, por ende, un movimiento absoluto con respecto a este espacio. Las modernas concepciones de la Relatividad también asumen la arbitrariedad de la elección del punto de reposo, con respecto al cual se pueden derivar entonces las ecuaciones de los movimientos de los demás objetos. 

    Así, se puede tomar la tierra, como el sol, como la luna, como cualquier objeto celeste, desde un punto de vista físico-cosmológico, como centro de movimientos de todo el universo, siendo cada uno de estos puntos, en palabras de Sir Fred Hoyle, «ni mejor ni peor que los demás». 

    Las Escrituras comparan la muerte prematura, la repentina pérdida de los bienes, con el ponerse del sol a mediodía (Jer. 15:9; Am. 8:9; Mi. 3:6). 

    Jeremías 15:9 

    9 Languideció la que dio a luz siete; se llenó de dolor su alma, su sol se puso siendo aún de día; fue avergonzada y llena de confusión; y lo que de ella quede, lo entregaré a la espada delante de sus enemigos, dice Jehová.

    Amós 8:9 

    9 Acontecerá en aquel día, dice Jehová el Señor, que haré que se ponga el sol a mediodía, y cubriré de tinieblas la tierra en el día claro.

    Miqueas 3:6

    6 Por tanto, de la profecía se os hará noche, y oscuridad del adivinar; y sobre los profetas se pondrá el sol, y el día se entenebrecerá sobre ellos.

    Los pueblos paganos contemporáneos de los hebreos adoraban al sol, en particular los babilonios en Sippar y en Larsa (o Samas) y los egipcios bajo la advocación de Ra, en On (cfr. Betsemes, «casa del sol», o Heliópolis, «ciudad del sol», otros nombres dados a On, Jer. 43:13; Gn. 41:45). (Véanse DIVINIDADES PAGANAS, EGIPTO, d.) 

    Jeremías 43:13 

    13 Además quebrará las estatuas de Bet-semes, que está en tierra de Egipto, y los templos de los dioses de Egipto quemará a fuego.

    Génesis 41:45

    45 Y llamó Faraón el nombre de José, Zafnat-panea; y le dio por mujer a Asenat, hija de Potifera sacerdote de On. Y salió José por toda la tierra de Egipto.

    Los profetas pusieron a los israelitas en guardia contra todas estas formas de paganismo, pero el culto solar ganó, sin embargo, adeptos entre ellos (cfr. QUMRÁN [MANUSCRITOS DE], f). 

    Los israelitas apóstatas erigieron altares al ejército de los cielos (2 R. 21:5), ofrecían sahumerios al sol, le dedicaban caballos (2 R. 23:5, 11; cfr. el culto persa, Herodoto 1:189; 7:54). 

    2 Reyes 21:5

    5 Y edificó altares para todo el ejército de los cielos en los dos atrios de la casa de Jehová.

    2 Reyes 23:5, 11

    5 Y quitó a los sacerdotes idólatras que habían puesto los reyes de Judá para que quemasen incienso en los lugares altos en las ciudades de Judá, y en los alrededores de Jerusalén; y asimismo a los que quemaban incienso a Baal, al sol y a la luna, y a los signos del zodíaco, y a todo el ejército de los cielos.

    11 Quitó también los caballos que los reyes de Judá habían dedicado al sol a la entrada del templo de Jehová, junto a la cámara de Natán-melec eunuco, el cual tenía a su cargo los ejidos; y quemó al fuego los carros del sol.

    Los idólatras enviaban besos a los astros, lanzándolos con la mano (Jb. 31:26-27). 

    Job 31:26-27

    26 Si he mirado al sol cuando resplandecía, O a la luna cuando iba hermosa,

    27 Y mi corazón se engañó en secreto, Y mi boca besó mi mano;

    Para la detención del sol sobre Gabaón, véase JOSUÉ (LIBRO DE); véase también RELOJ DE SOL. 

    El término heb. «hammãnîm» ha sido traducido «imágenes» (o columnas, estelas) consagradas al sol (Lv. 26:30; 2 Cr. 14:5; 34:4; 7; Is. 17:8; 27:9; Ez. 6:4, 6). 

    Levítico 26:30 

    30 Destruiré vuestros lugares altos, y derribaré vuestras imágenes, y pondré vuestros cuerpos muertos sobre los cuerpos muertos de vuestros ídolos, y mi alma os abominará.

    2 Crónicas 14:5 

    5 Quitó asimismo de todas las ciudades de Judá los lugares altos y las imágenes, y estuvo el reino en paz bajo su reinado.

    2 Crónicas 34:4,7 

    4 Y derribaron delante de él los altares de los baales, e hizo pedazos las imágenes del sol, que estaban puestas encima; despedazó también los imágenes de Asera, y las esculturas y estatuas fundidas, y las desmenuzó, y esparció el polvo sobre los sepulcros de los que les habían ofrecido sacrificio.

    7 Y cuando hubo derribado los altares y los imágenes de Asera, y quebrado y desmenuzado las esculturas, y destruído todos los ídolos por toda la tierra de Israel, volvió a Jerusalén.

    Isaías 17:8 

    8 Y no mirará a los altares que hicieron sus manos, ni mirará a lo que hicieron sus dedos, ni a los símbolos de Asera, ni a las imágenes del sol.

    Isaías 27:9 

    9 De esta manera, pues, será perdonada la iniquidad de Jacob, y este será todo el fruto, la remoción de su pecado; cuando haga todas las piedras del altar como piedras de cal desmenuzadas, y no se levanten los símbolos de Asera ni las imágenes del sol.

    Ezequiel 6:4, 6

    4 Vuestros altares serán asolados, y vuestras imágenes del sol serán quebradas; y haré que caigan vuestros muertos delante de vuestros ídolos.

    6 Dondequiera que habitéis, serán desiertas las ciudades, y los lugares altos serán asolados, para que sean asolados y se hagan desiertos vuestros altares; y vuestros ídolos serán quebrados y acabarán, vuestras imágenes del sol serán destruidas, y vuestras obras serán deshechas.

    Pero en Palmira se ha descubierto un altar que llevaba un nombre relacionado con el heb. «hammãnîm». 

    Así, las «imágenes» o «columnas» dedicadas al sol pudieron más bien ser altares donde se le quemaba incienso (cfr. Os. 4:13). 

    Oseas 4:13

    13 Sobre las cimas de los montes sacrificaron, e incensaron sobre los collados, debajo de las encinas, álamos y olmos que tuviesen buena sombra; por tanto, vuestras hijas fornicarán, y adulterarán vuestras nueras.

    En Meguido se hallaron altares similares, anteriores al siglo X a.C., y que se usaban para el culto a Baal.

    VÉASE: Divinidades paganas , Egipto , Qumrán , Josué (Libro) , Reloj de sol
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    Astro del día. Dios lo creó (Gn. 1:16; Sal. 74:16; 136:8), lo mantiene y lo dirige (Jer. 31:35; Mt. 5:45; Sal. 104:19). 

    Génesis 1:16 

    16 E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas.

    Salmos 74:16 

    16 Tuyo es el día, tuya también es la noche; Tú estableciste la luna y el sol.

    Salmos 136:8

    8 El sol para que señorease en el día, Porque para siempre es su misericordia.

    Jeremías 31:35 

    35 Así ha dicho Jehová, que da el sol para luz del día, las leyes de la luna y de las estrellas para luz de la noche, que parte el mar, y braman sus ondas; Jehová de los ejércitos es su nombre:

    Mateo 5:45 

    45 para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.

    Salmos 104:19

    19 Hizo la luna para los tiempos; El sol conoce su ocaso.

    La vegetación crece, pero también se deseca bajo el calor del sol (Dt. 33:14; 2 S. 23:4; Jon. 4:8). 

    Deuteronomio 33:14 

    14 Con los más escogidos frutos del sol, Con el rico producto de la luna,

    2 Samuel 23:4 

    4 Será como la luz de la mañana, Como el resplandor del sol en una mañana sin nubes, Como la lluvia que hace brotar la hierba de la tierra.

    Jonás 4:8

    8 Y aconteció que al salir el sol, preparó Dios un recio viento solano, y el sol hirió a Jonás en la cabeza, y se desmayaba, y deseaba la muerte, diciendo: Mejor sería para mí la muerte que la vida.

    La Biblia dice que el sol se levanta, se pone, recorre el camino en su curso en los cielos (Sal. 19:4-6). 

    Salmos 19:4-6

    4 Por toda la tierra salió su voz, Y hasta el extremo del mundo sus palabras. En ellos puso tabernáculo para el sol;

    5 Y éste, como esposo que sale de su tálamo, Se alegra cual gigante para correr el camino.

    6 De un extremo de los cielos es su salida, Y su curso hasta el término de ellos; Y nada hay que se esconda de su calor.

    Estas expresiones siguen siendo usadas en la actualidad. Se ha querido mostrar como argumento en contra de las Escrituras, que presenten al sol como moviéndose en relación con la tierra. Sin embargo, esta postura es, desde el terreno de la misma cosmología, insostenible. 

    En base a la mecánica, todos los movimientos del universo son mutuamente relativos, y el punto de referencia que se tome como fijo para medir los movimientos de todos los demás objetos con respecto a este punto es totalmente arbitrario desde el punto de vista de la física. 

    Ello se debe al fracaso en el intento de llegar a probar un espacio newtoniano absoluto y, por ende, un movimiento absoluto con respecto a este espacio. Las modernas concepciones de la Relatividad también asumen la arbitrariedad de la elección del punto de reposo, con respecto al cual se pueden derivar entonces las ecuaciones de los movimientos de los demás objetos. 

    Así, se puede tomar la tierra, como el sol, como la luna, como cualquier objeto celeste, desde un punto de vista físico-cosmológico, como centro de movimientos de todo el universo, siendo cada uno de estos puntos, en palabras de Sir Fred Hoyle, «ni mejor ni peor que los demás». 

    Las Escrituras comparan la muerte prematura, la repentina pérdida de los bienes, con el ponerse del sol a mediodía (Jer. 15:9; Am. 8:9; Mi. 3:6). 

    Jeremías 15:9 

    9 Languideció la que dio a luz siete; se llenó de dolor su alma, su sol se puso siendo aún de día; fue avergonzada y llena de confusión; y lo que de ella quede, lo entregaré a la espada delante de sus enemigos, dice Jehová.

    Amós 8:9 

    9 Acontecerá en aquel día, dice Jehová el Señor, que haré que se ponga el sol a mediodía, y cubriré de tinieblas la tierra en el día claro.

    Miqueas 3:6

    6 Por tanto, de la profecía se os hará noche, y oscuridad del adivinar; y sobre los profetas se pondrá el sol, y el día se entenebrecerá sobre ellos.

    Los pueblos paganos contemporáneos de los hebreos adoraban al sol, en particular los babilonios en Sippar y en Larsa (o Samas) y los egipcios bajo la advocación de Ra, en On (cfr. Betsemes, «casa del sol», o Heliópolis, «ciudad del sol», otros nombres dados a On, Jer. 43:13; Gn. 41:45). (Véanse DIVINIDADES PAGANAS, EGIPTO, d.) 

    Jeremías 43:13 

    13 Además quebrará las estatuas de Bet-semes, que está en tierra de Egipto, y los templos de los dioses de Egipto quemará a fuego.

    Génesis 41:45

    45 Y llamó Faraón el nombre de José, Zafnat-panea; y le dio por mujer a Asenat, hija de Potifera sacerdote de On. Y salió José por toda la tierra de Egipto.

    Los profetas pusieron a los israelitas en guardia contra todas estas formas de paganismo, pero el culto solar ganó, sin embargo, adeptos entre ellos (cfr. QUMRÁN [MANUSCRITOS DE], f). 

    Los israelitas apóstatas erigieron altares al ejército de los cielos (2 R. 21:5), ofrecían sahumerios al sol, le dedicaban caballos (2 R. 23:5, 11; cfr. el culto persa, Herodoto 1:189; 7:54). 

    2 Reyes 21:5

    5 Y edificó altares para todo el ejército de los cielos en los dos atrios de la casa de Jehová.

    2 Reyes 23:5, 11

    5 Y quitó a los sacerdotes idólatras que habían puesto los reyes de Judá para que quemasen incienso en los lugares altos en las ciudades de Judá, y en los alrededores de Jerusalén; y asimismo a los que quemaban incienso a Baal, al sol y a la luna, y a los signos del zodíaco, y a todo el ejército de los cielos.

    11 Quitó también los caballos que los reyes de Judá habían dedicado al sol a la entrada del templo de Jehová, junto a la cámara de Natán-melec eunuco, el cual tenía a su cargo los ejidos; y quemó al fuego los carros del sol.

    Los idólatras enviaban besos a los astros, lanzándolos con la mano (Jb. 31:26-27). 

    Job 31:26-27

    26 Si he mirado al sol cuando resplandecía, O a la luna cuando iba hermosa,

    27 Y mi corazón se engañó en secreto, Y mi boca besó mi mano;

    Para la detención del sol sobre Gabaón, véase JOSUÉ (LIBRO DE); véase también RELOJ DE SOL. 

    El término heb. «hammãnîm» ha sido traducido «imágenes» (o columnas, estelas) consagradas al sol (Lv. 26:30; 2 Cr. 14:5; 34:4; 7; Is. 17:8; 27:9; Ez. 6:4, 6). 

    Levítico 26:30 

    30 Destruiré vuestros lugares altos, y derribaré vuestras imágenes, y pondré vuestros cuerpos muertos sobre los cuerpos muertos de vuestros ídolos, y mi alma os abominará.

    2 Crónicas 14:5 

    5 Quitó asimismo de todas las ciudades de Judá los lugares altos y las imágenes, y estuvo el reino en paz bajo su reinado.

    2 Crónicas 34:4,7 

    4 Y derribaron delante de él los altares de los baales, e hizo pedazos las imágenes del sol, que estaban puestas encima; despedazó también los imágenes de Asera, y las esculturas y estatuas fundidas, y las desmenuzó, y esparció el polvo sobre los sepulcros de los que les habían ofrecido sacrificio.

    7 Y cuando hubo derribado los altares y los imágenes de Asera, y quebrado y desmenuzado las esculturas, y destruído todos los ídolos por toda la tierra de Israel, volvió a Jerusalén.

    Isaías 17:8 

    8 Y no mirará a los altares que hicieron sus manos, ni mirará a lo que hicieron sus dedos, ni a los símbolos de Asera, ni a las imágenes del sol.

    Isaías 27:9 

    9 De esta manera, pues, será perdonada la iniquidad de Jacob, y este será todo el fruto, la remoción de su pecado; cuando haga todas las piedras del altar como piedras de cal desmenuzadas, y no se levanten los símbolos de Asera ni las imágenes del sol.

    Ezequiel 6:4, 6

    4 Vuestros altares serán asolados, y vuestras imágenes del sol serán quebradas; y haré que caigan vuestros muertos delante de vuestros ídolos.

    6 Dondequiera que habitéis, serán desiertas las ciudades, y los lugares altos serán asolados, para que sean asolados y se hagan desiertos vuestros altares; y vuestros ídolos serán quebrados y acabarán, vuestras imágenes del sol serán destruidas, y vuestras obras serán deshechas.

    Pero en Palmira se ha descubierto un altar que llevaba un nombre relacionado con el heb. «hammãnîm». 

    Así, las «imágenes» o «columnas» dedicadas al sol pudieron más bien ser altares donde se le quemaba incienso (cfr. Os. 4:13). 

    Oseas 4:13

    13 Sobre las cimas de los montes sacrificaron, e incensaron sobre los collados, debajo de las encinas, álamos y olmos que tuviesen buena sombra; por tanto, vuestras hijas fornicarán, y adulterarán vuestras nueras.

    En Meguido se hallaron altares similares, anteriores al siglo X a.C., y que se usaban para el culto a Baal.

    VÉASE:
    Divinidades paganas , Egipto , Qumrán , Josué (Libro) , Reloj de sol
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