Diccionario
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  • Pascua
    (término derivado del heb. «pesach», de «pasar de»: cfr. Éx. 12:13, 22, 27; Ant. 2:14, 6). 

    Éxodo 12:13, 22, 27 

    13 Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto.

    22 Y tomad un manojo de hisopo, y mojadlo en la sangre que estará en un lebrillo, y untad el dintel y los dos postes con la sangre que estará en el lebrillo; y ninguno de vosotros salga de las puertas de su casa hasta la mañana.

    27 vosotros responderéis: Es la víctima de la pascua de Jehová, el cual pasó por encima de las casas de los hijos de Israel en Egipto, cuando hirió a los egipcios, y libró nuestras casas. Entonces el pueblo se inclinó y adoró.

    (a) La primera de las tres solemnidades anuales en las que todo varón israelita no impedido se debía presentar en el Templo (Éx. 12:43; Dt. 16:1). 

    Éxodo 12:43 

    43 Y Jehová dijo a Moisés y a Aarón: Esta es la ordenanza de la pascua; ningún extraño comerá de ella.

    Deuteronomio 16:1

    Fiestas anuales

    1 Guardarás el mes de Abib, y harás pascua a Jehová tu Dios; porque en el mes de Abib te sacó Jehová tu Dios de Egipto, de noche.

    Fue instituida en Egipto con el fin de conmemorar el acontecimiento fundamental de la liberación de los israelitas (Éx. 12:1, 14, 42; 23:15; Dt. 16:1, 2). 

    Éxodo 12:1, 14, 42 

    La Pascua

    1 Habló Jehová a Moisés y a Aarón en la tierra de Egipto, diciendo:

    14 Y este día os será en memoria, y lo celebraréis como fiesta solemne para Jehová durante vuestras generaciones; por estatuto perpetuo lo celebraréis.

    42 Es noche de guardar para Jehová, por haberlos sacado en ella de la tierra de Egipto. Esta noche deben guardarla para Jehová todos los hijos de Israel en sus generaciones.

    Éxodo 23:15 

    15 La fiesta de los panes sin levadura guardarás. Siete días comerás los panes sin levadura, como yo te mandé, en el tiempo del mes de Abib, porque en él saliste de Egipto; y ninguno se presentará delante de mí con las manos vacías.

    Deuteronomio 16:1, 2

    Fiestas anuales

    1 Guardarás el mes de Abib, y harás pascua a Jehová tu Dios; porque en el mes de Abib te sacó Jehová tu Dios de Egipto, de noche.

    2 Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas, en el lugar que Jehová escogiere para que habite allí su nombre.

    Con ella se celebraba solemnemente el hecho de que Dios, que había hecho morir a todos los primogénitos de la tierra de Egipto, había sin embargo pasado por alto las moradas de los israelitas, marcadas con la sangre del cordero. 

    Debían comerla apresuradamente, con el bastón en la mano, y con la actitud de personas dispuestas a partir en la liberación prometida por Dios. 

    La fiesta comenzaba el día catorce del mes de Abib (Nisán) al atardecer, esto es, al inicio del día quince, con la comida que seguía al sacrificio del cordero (Lv. 23:5). 

    Levítico 23:5

    5 En el mes primero, a los catorce del mes, entre las dos tardes, pascua es de Jehová.

    Se daba muerte a un cordero o a un cabrito entre las dos tardes, cerca del momento del ocaso (Éx. 12:6; Dt. 16:6), o entre las horas novena y undécima (Guerras 6:9, 3). 

    Éxodo 12:6 

    6 Y lo guardaréis hasta el día catorce de este mes, y lo inmolará toda la congregación del pueblo de Israel entre las dos tardes.

    Deuteronomio 16:6

    6 sino en el lugar que Jehová tu Dios escogiere para que habite allí su nombre, sacrificarás la pascua por la tarde a la puesta del sol, a la hora que saliste de Egipto.

    Asado entero, se comía con panes sin levadura y con hierbas amargas (Éx. 12:8). 

    Éxodo 12:8

    8 Y aquella noche comerán la carne asada al fuego, y panes sin levadura; con hierbas amargas lo comerán.

    No podía ser hervido en agua. Su sangre derramada era tipo de la expiación; las hierbas amargas simbolizaban los sufrimientos de la esclavitud en Egipto, y el pan sin levadura representaba la pureza (cfr. Lv. 2:11; 1 Co. 5:7, 8). 

    Levítico 2:11 

    11 Ninguna ofrenda que ofreciereis a Jehová será con levadura; porque de ninguna cosa leuda, ni de ninguna miel, se ha de quemar ofrenda para Jehová.

    1 Corintios 5:7, 8

    7 Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.

    8 Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad.

    Los israelitas que tomaban parte en este acto de redención constituían el pueblo santo, comunicando gozosamente en presencia del Dios invisible. 

    La participación en la cena pascual era obligatoria sólo para los varones, aunque las mujeres tenían derecho a participar, así como toda la casa. 

    Si la familia era poco numerosa, podían juntarse vecinos con ellos para comer todo el cordero (Éx. 12:4). 

    Éxodo 12:4

    4 Mas si la familia fuere tan pequeña que no baste para comer el cordero, entonces él y su vecino inmediato a su casa tomarán uno según el número de las personas; conforme al comer de cada hombre, haréis la cuenta sobre el cordero.

    La pascua expone en tipo la ofrenda de Cristo como aquello en lo que se ha declarado la justicia de Dios con respecto al pecado. 

    La sangre del cordero era un testimonio de muerte, esto es, de la eliminación a los ojos de Dios del hombre en su pecado contra Él. 

    Esta eliminación tuvo lugar vicariamente en la persona del Justo, que se dio a Sí mismo como rescate por todos. 

    Al comer el cordero asado al fuego (emblema de juicio), el pueblo se asociaba en aquello que había tenido lugar en tipo. El Señor Jesús deseó vivamente comer la última pascua con Sus discípulos, por cuanto formaban todos un singular círculo «familiar». 

    Esta pascua estaba a punto de ser cumplida en Cristo mismo, que tomaba Su lugar de separación de la tierra hasta el advenimiento del reino de Dios (Lc. 22:15-18). 

    Lucas 22:15-18

    15 Y les dijo: ¡Cuánto he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca!

    16 Porque os digo que no la comeré más, hasta que se cumpla en el reino de Dios.

    17 Y habiendo tomado la copa, dio gracias, y dijo: Tomad esto, y repartidlo entre vosotros;

    18 porque os digo que no beberé más del fruto de la vid, hasta que el reino de Dios venga.

    Manera de comer la Pascua. Las autoridades judías señalan que la manera de comer la pascua en la época del Señor era la siguiente: 

    (A) Cuando todos estaban en su lugar, el presidente de la fiesta daba las gracias, y todos bebían entonces de la primera copa de vino mezclado con agua. 

    (B) Todos se lavaban las manos. 

    (C) Se preparaba la mesa con el cordero pascual, panes sin levadura, hierbas amargas, y un plato de salsa espesa (con la que se decía simbolizar el mortero con el que hacían los ladrillos en Egipto). 

    (D) Todos mojaban una parte de las hierbas amargas en la salsa, y la comían. 

    (E) Se sacaban los platos de la mesa, y los niños o prosélitos recibían instrucción acerca del significado de la fiesta. 

    (F) Después se volvían a traer los platos, y el presidente decía: «Ésta es la pascua que comemos, porque el Señor pasó por alto las casas de nuestros padres en Egipto.» Sosteniendo en alto las hierbas amargas, decía a continuación: «Éstas son las hierbas amargas que comemos en memoria de que los egipcios amargaron la vida de nuestros padres en Egipto.» Después se refería al pan sin levadura, y repetía los salmos 113 y 114, finalizando con una oración. Todos bebían entonces la segunda copa de vino. 

    Salmos 113

    Dios levanta al pobre

    1 Alabad, siervos de Jehová, Alabad el nombre de Jehová.

    2 Sea el nombre de Jehová bendito Desde ahora y para siempre.

    3 Desde el nacimiento del sol hasta donde se pone, Sea alabado el nombre de Jehová.

    4 Excelso sobre todas las naciones es Jehová, Sobre los cielos su gloria.

    5 ¿Quién como Jehová nuestro Dios, Que se sienta en las alturas,

    6 Que se humilla a mirar En el cielo y en la tierra?

    7 El levanta del polvo al pobre, Y al menesteroso alza del muladar,

    8 Para hacerlos sentar con los príncipes, Con los príncipes de su pueblo.

    9 El hace habitar en familia a la estéril, Que se goza en ser madre de hijos. Aleluya.

    Salmos 114

    Las maravillas del Exodo

    1 Cuando salió Israel de Egipto, La casa de Jacob del pueblo extranjero,

    2 Judá vino a ser su santuario, E Israel su señorío.

    3 El mar lo vio, y huyó; El Jordán se volvió atrás.

    4 Los montes saltaron como carneros, Los collados como corderitos.

    5 ¿Qué tuviste, oh mar, que huiste? ¿Y tú, oh Jordán, que te volviste atrás?

    6 Oh montes, ¿por qué saltasteis como carneros, Y vosotros, collados, como corderitos?

    7 A la presencia de Jehová tiembla la tierra, A la presencia del Dios de Jacob,

    8 El cual cambió la peña en estanque de aguas, Y en fuente de aguas la roca.

    (G) El presidente rompía uno de los panes sin levadura, y daba las gracias. 

    (H) Todos participaban entonces del cordero pascual. 

    (I) Para finalizar la cena, todos tomaban un trozo de pan con algo de hierbas amargas, y, habiéndolo mojado en la salsa, se lo comían. 

    (J) Bebían entonces la tercera copa de vino, llamada «copa de bendición». 

    (K) El presidente pronunciaba entonces los Sal. 115, 116, 117 y 118, y con otra copa de vino finalizaba la fiesta. 

    Salmos 115

    Dios y los ídolos

    1 No a nosotros, oh Jehová, no a nosotros, Sino a tu nombre da gloria, Por tu misericordia, por tu verdad.

    2 ¿Por qué han de decir las gentes: ¿Dónde está ahora su Dios?

    3 Nuestro Dios está en los cielos; Todo lo que quiso ha hecho.

    4 Los ídolos de ellos son plata y oro, Obra de manos de hombres.

    5 Tienen boca, mas no hablan; Tienen ojos, mas no ven;

    6 Orejas tienen, mas no oyen; Tienen narices, mas no huelen;

    7 Manos tienen, mas no palpan; Tienen pies, mas no andan; No hablan con su garganta.

    8 Semejantes a ellos son los que los hacen, Y cualquiera que confía en ellos.

    9 Oh Israel, confía en Jehová; El es tu ayuda y tu escudo.

    10 Casa de Aarón, confiad en Jehová; El es vuestra ayuda y vuestro escudo.

    11 Los que teméis a Jehová, confiad en Jehová; El es vuestra ayuda y vuestro escudo.

    12 Jehová se acordó de nosotros; nos bendecirá; Bendecirá a la casa de Israel; Bendecirá a la casa de Aarón.

    13 Bendecirá a los que temen a Jehová, A pequeños y a grandes.

    14 Aumentará Jehová bendición sobre vosotros; Sobre vosotros y sobre vuestros hijos.

    15 Benditos vosotros de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra.

    16 Los cielos son los cielos de Jehová; Y ha dado la tierra a los hijos de los hombres.

    17 No alabarán los muertos a JAH, Ni cuantos descienden al silencio;

    18 Pero nosotros bendeciremos a JAH Desde ahora y para siempre. Aleluya.

    Salmos 116

    Acción de gracias por haber sido librado de la muerte

    1 Amo a Jehová, pues ha oído Mi voz y mis súplicas;

    2 Porque ha inclinado a mí su oído; Por tanto, le invocaré en todos mis días.

    3 Me rodearon ligaduras de muerte, Me encontraron las angustias del Seol; Angustia y dolor había yo hallado.

    4 Entonces invoqué el nombre de Jehová, diciendo: Oh Jehová, libra ahora mi alma.

    5 Clemente es Jehová, y justo; Sí, misericordioso es nuestro Dios.

    6 Jehová guarda a los sencillos; Estaba yo postrado, y me salvó.

    7 Vuelve, oh alma mía, a tu reposo, Porque Jehová te ha hecho bien.

    8 Pues tú has librado mi alma de la muerte, Mis ojos de lágrimas, Y mis pies de resbalar.

    9 Andaré delante de Jehová En la tierra de los vivientes.

    10 Creí; por tanto hablé, Estando afligido en gran manera.

    11 Y dije en mi apresuramiento: Todo hombre es mentiroso.

    12 ¿Qué pagaré a Jehová Por todos sus beneficios para conmigo?

    13 Tomaré la copa de la salvación, E invocaré el nombre de Jehová.

    14 Ahora pagaré mis votos a Jehová Delante de todo su pueblo.

    15 Estimada es a los ojos de Jehová La muerte de sus santos.

    16 Oh Jehová, ciertamente yo soy tu siervo, Siervo tuyo soy, hijo de tu sierva; Tú has roto mis prisiones.

    17 Te ofreceré sacrificio de alabanza, E invocaré el nombre de Jehová.

    18 A Jehová pagaré ahora mis votos Delante de todo su pueblo,

    19 En los atrios de la casa de Jehová, En medio de ti, oh Jerusalén. Aleluya.

    Salmos 117

    Alabanza por la misericordia de Jehová

    1 Alabad a Jehová, naciones todas; Pueblos todos, alabadle.

    2 Porque ha engrandecido sobre nosotros su misericordia, Y la fidelidad de Jehová es para siempre. Aleluya.

    Salmos 118

    Acción de gracias por la salvación recibida de Jehová

    1 Alabad a Jehová, porque él es bueno; Porque para siempre es su misericordia.

    2 Diga ahora Israel, Que para siempre es su misericordia.

    3 Diga ahora la casa de Aarón, Que para siempre es su misericordia.

    4 Digan ahora los que temen a Jehová, Que para siempre es su misericordia.

    5 Desde la angustia invoqué a JAH, Y me respondió JAH, poniéndome en lugar espacioso.

    6 Jehová está conmigo; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.

    7 Jehová está conmigo entre los que me ayudan; Por tanto, yo veré mi deseo en los que me aborrecen.

    8 Mejor es confiar en Jehová Que confiar en el hombre.

    9 Mejor es confiar en Jehová Que confiar en príncipes.

    10 Todas las naciones me rodearon; Mas en el nombre de Jehová yo las destruiré.

    11 Me rodearon y me asediaron; Mas en el nombre de Jehová yo las destruiré.

    12 Me rodearon como abejas; se enardecieron como fuego de espinos; Mas en el nombre de Jehová yo las destruiré.

    13 Me empujaste con violencia para que cayese, Pero me ayudó Jehová.

    14 Mi fortaleza y mi cántico es JAH, Y él me ha sido por salvación.

    15 Voz de júbilo y de salvación hay en las tiendas de los justos; La diestra de Jehová hace proezas.

    16 La diestra de Jehová es sublime; La diestra de Jehová hace valentías.

    17 No moriré, sino que viviré, Y contaré las obras de JAH.

    18 Me castigó gravemente JAH, Mas no me entregó a la muerte.

    19 Abridme las puertas de la justicia; Entraré por ellas, alabaré a JAH.

    20 Esta es puerta de Jehová; Por ella entrarán los justos.

    21 Te alabaré porque me has oído, Y me fuiste por salvación.

    22 La piedra que desecharon los edificadores Ha venido a ser cabeza del ángulo.

    23 De parte de Jehová es esto, Y es cosa maravillosa a nuestros ojos.

    24 Este es el día que hizo Jehová; Nos gozaremos y alegraremos en él.

    25 Oh Jehová, sálvanos ahora, te ruego; Te ruego, oh Jehová, que nos hagas prosperar ahora.

    26 Bendito el que viene en el nombre de Jehová; Desde la casa de Jehová os bendecimos.

    27 Jehová es Dios, y nos ha dado luz; Atad víctimas con cuerdas a los cuernos del altar.

    28 Mi Dios eres tú, y te alabaré; Dios mío, te exaltaré.

    29 Alabad a Jehová, porque él es bueno; Porque para siempre es su misericordia.

    Después de la destrucción del Templo de Jerusalén por las tropas de Tito, desapareció la posibilidad de inmolar el cordero en el Templo, por lo que el judaísmo celebra desde entonces la pascua sin la víctima, sin su componente central, que era precisamente el tipo de Aquel a quien ellos rechazaron, y a quien reconocerán cuando venga en gloria (cfr. Zac. 12:9-14 ss.; 14:1-9). 

    Zacarías 12:9-14

    9 Y en aquel día yo procuraré destruir a todas las naciones que vinieren contra Jerusalén.

    10 Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito.

    11 En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén, como el llanto de Hadadrimón en el valle de Meguido.

    12 Y la tierra lamentará, cada linaje aparte; los descendientes de la casa de David por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de la casa de Natán por sí, y sus mujeres por sí;

    13 los descendientes de la casa de Leví por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de Simei por sí, y sus mujeres por sí;

    14 todos los otros linajes, cada uno por sí, y sus mujeres por sí.

    Zacarías 14:1-9

    Jerusalén y las naciones

    1 He aquí, el día de Jehová viene, y en medio de ti serán repartidos tus despojos.

    2 Porque yo reuniré a todas las naciones para combatir contra Jerusalén; y la ciudad será tomada, y serán saqueadas las casas, y violadas las mujeres; y la mitad de la ciudad irá en cautiverio, mas el resto del pueblo no será cortado de la ciudad.

    3 Después saldrá Jehová y peleará con aquellas naciones, como peleó en el día de la batalla.

    4 Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos, que está en frente de Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia el oriente y hacia el occidente, haciendo un valle muy grande; y la mitad del monte se apartará hacia el norte, y la otra mitad hacia el sur.

    5 Y huiréis al valle de los montes, porque el valle de los montes llegará hasta Azal; huiréis de la manera que huisteis por causa del terremoto en los días de Uzías rey de Judá; y vendrá Jehová mi Dios, y con él todos los santos.

    6 Y acontecerá que en ese día no habrá luz clara, ni oscura.

    7 Será un día, el cual es conocido de Jehová, que no será ni día ni noche; pero sucederá que al caer la tarde habrá luz.

    8 Acontecerá también en aquel día, que saldrán de Jerusalén aguas vivas, la mitad de ellas hacia el mar oriental, y la otra mitad hacia el mar occidental, en verano y en invierno.

    9 Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, y uno su nombre.

    Íntimamente relacionada con la pascua había la «Fiesta de los panes sin levadura». 

    La cena pascual era el aspecto característico de esta fiesta, que se prolongaba hasta el día veintiuno del mes (Éx. 12:18; Lv. 23:5, 6; Dt. 16:6, 7). 

    Éxodo 12:18 

    18 En el mes primero comeréis los panes sin levadura, desde el día catorce del mes por la tarde hasta el veintiuno del mes por la tarde.

    Levítico 23:5, 6 

    5 En el mes primero, a los catorce del mes, entre las dos tardes, pascua es de Jehová.

    6 Y a los quince días de este mes es la fiesta solemne de los panes sin levadura a Jehová; siete días comeréis panes sin levadura.

    Deuteronomio 16:6, 7

    6 sino en el lugar que Jehová tu Dios escogiere para que habite allí su nombre, sacrificarás la pascua por la tarde a la puesta del sol, a la hora que saliste de Egipto.

    7 Y la asarás y comerás en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido; y por la mañana regresarás y volverás a tu habitación.

    El día en que los israelitas abandonaron Egipto, Moisés les reveló que la solemnidad de la pascua duraría siete días (Éx. 12:14-20; 13:3-10). 

    Éxodo 12:14-20 

    14 Y este día os será en memoria, y lo celebraréis como fiesta solemne para Jehová durante vuestras generaciones; por estatuto perpetuo lo celebraréis.

    15 Siete días comeréis panes sin levadura; y así el primer día haréis que no haya levadura en vuestras casas; porque cualquiera que comiere leudado desde el primer día hasta el séptimo, será cortado de Israel.

    16 El primer día habrá santa convocación, y asimismo en el séptimo día tendréis una santa convocación; ninguna obra se hará en ellos, excepto solamente que preparéis lo que cada cual haya de comer.

    17 Y guardaréis la fiesta de los panes sin levadura, porque en este mismo día saqué vuestras huestes de la tierra de Egipto; por tanto, guardaréis este mandamiento en vuestras generaciones por costumbre perpetua.

    18 En el mes primero comeréis los panes sin levadura, desde el día catorce del mes por la tarde hasta el veintiuno del mes por la tarde.

    19 Por siete días no se hallará levadura en vuestras casas; porque cualquiera que comiere leudado, así extranjero como natural del país, será cortado de la congregación de Israel.

    20 Ninguna cosa leudada comeréis; en todas vuestras habitaciones comeréis panes sin levadura.

    Éxodo 13:3-10

    3 Y Moisés dijo al pueblo: Tened memoria de este día, en el cual habéis salido de Egipto, de la casa de servidumbre, pues Jehová os ha sacado de aquí con mano fuerte; por tanto, no comeréis leudado.

    4 Vosotros salís hoy en el mes de Abib.

    5 Y cuando Jehová te hubiere metido en la tierra del cananeo, del heteo, del amorreo, del heveo y del jebuseo, la cual juró a tus padres que te daría, tierra que destila leche y miel, harás esta celebración en este mes.

    6 Siete días comerás pan sin leudar, y el séptimo día será fiesta para Jehová.

    7 Por los siete días se comerán los panes sin levadura, y no se verá contigo nada leudado, ni levadura, en todo tu territorio.

    8 Y lo contarás en aquel día a tu hijo, diciendo: Se hace esto con motivo de lo que Jehová hizo conmigo cuando me sacó de Egipto.

    9 Y te será como una señal sobre tu mano, y como un memorial delante de tus ojos, para que la ley de Jehová esté en tu boca; por cuanto con mano fuerte te sacó Jehová de Egipto.

    10 Por tanto, tú guardarás este rito en su tiempo de año en año.

    Les había dado entonces las instrucciones necesarias sólo para la primera noche (Éx. 12:21-23), informándoles que sería un estatuto perpetuo (Éx. 12:24, 25). 

    Éxodo 12:21-23

    21 Y Moisés convocó a todos los ancianos de Israel, y les dijo: Sacad y tomaos corderos por vuestras familias, y sacrificad la pascua.

    22 Y tomad un manojo de hisopo, y mojadlo en la sangre que estará en un lebrillo, y untad el dintel y los dos postes con la sangre que estará en el lebrillo; y ninguno de vosotros salga de las puertas de su casa hasta la mañana.

    23 Porque Jehová pasará hiriendo a los egipcios; y cuando vea la sangre en el dintel y en los dos postes, pasará Jehová aquella puerta, y no dejará entrar al heridor en vuestras casas para herir.

    Éxodo 12:24, 25

    24 Guardaréis esto por estatuto para vosotros y para vuestros hijos para siempre.

    25 Y cuando entréis en la tierra que Jehová os dará, como prometió, guardaréis este rito.

    La presencia de los peregrinos en el santuario central elegido por Jehová para la celebración de la fiesta era obligatoria sólo durante el tiempo de la cena pascual; al día siguiente podían dirigirse a sus propias localidades (Dt. 16:7). 

    Deuteronomio 16:7

    7 Y la asarás y comerás en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido; y por la mañana regresarás y volverás a tu habitación.

    El primer día de la fiesta se correspondía con el día quince del mes, que adquiría el carácter de sábado, lo mismo que el día séptimo de la pascua: en estos días no se debía hacer ninguna obra servil, pues estaban marcados para convocación santa (Éx. 12:16; Lv. 23:7; Nm. 28:18, 25; Éx. 13:6; Dt. 16:8). 

    Éxodo 12:16 

    16 El primer día habrá santa convocación, y asimismo en el séptimo día tendréis una santa convocación; ninguna obra se hará en ellos, excepto solamente que preparéis lo que cada cual haya de comer.

    Levítico 23:7 

    7 El primer día tendréis santa convocación; ningún trabajo de siervos haréis.

    Números 28:18, 25 

    18 El primer día será santa convocación; ninguna obra de siervos haréis.

    25 Y el séptimo día tendréis santa convocación; ninguna obra de siervos haréis.

    Éxodo 13:6 

    6 Siete días comerás pan sin leudar, y el séptimo día será fiesta para Jehová.

    Deuteronomio 16:8

    8 Seis días comerás pan sin levadura, y el séptimo día será fiesta solemne a Jehová tu Dios; no trabajarás en él.

    Al siguiente día de este sábado, el segundo día de la fiesta, el sacerdote mecía delante de Jehová una gavilla de cebada, primicia de la siega: este gesto consagraba el inicio de las cosechas (Lv. 23:10-14; cfr. Jos. 5:10-12; Lv. 23:7, 11 en la LXX; Ant. 3:10, 15). (Véanse FIESTAS Y PENTECOSTÉS.) 

    Levítico 23:10-14 

    10 Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando hayáis entrado en la tierra que yo os doy, y seguéis su mies, traeréis al sacerdote una gavilla por primicia de los primeros frutos de vuestra siega.

    11 Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis aceptos; el día siguiente del día de reposo la mecerá.

    12 Y el día que ofrezcáis la gavilla, ofreceréis un cordero de un año, sin defecto, en holocausto a Jehová.

    13 Su ofrenda será dos décimas de efa de flor de harina amasada con aceite, ofrenda encendida a Jehová en olor gratísimo; y su libación será de vino, la cuarta parte de un hin.

    14 No comeréis pan, ni grano tostado, ni espiga fresca, hasta este mismo día, hasta que hayáis ofrecido la ofrenda de vuestro Dios; estatuto perpetuo es por vuestras edades en dondequiera que habitéis.

    Josué 5:10-12 

    10 Y los hijos de Israel acamparon en Gilgal, y celebraron la pascua a los catorce días del mes, por la tarde, en los llanos de Jericó.

    11 Al otro día de la pascua comieron del fruto de la tierra, los panes sin levadura, y en el mismo día espigas nuevas tostadas.

    12 Y el maná cesó el día siguiente, desde que comenzaron a comer del fruto de la tierra; y los hijos de Israel nunca más tuvieron maná, sino que comieron de los frutos de la tierra de Canaán aquel año.

    Levítico 23:7, 11

    7 El primer día tendréis santa convocación; ningún trabajo de siervos haréis.

    11 Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis aceptos; el día siguiente del día de reposo la mecerá.

    Pero el día del mecimiento de la gavilla no era asimilado a sábado. El año agrícola tenía más relación con la fiesta de las semanas o de pentecostés y con la de los tabernáculos o cabañas que con la pascua. 

    Además de los sacrificios habituales en el Templo, se debían ofrecer en holocausto cotidiano, durante los siete días de solemnidades pascuales, dos becerros, un carnero, siete corderos de un año y, como sacrificio de expiación, un macho cabrío (Lv. 23:8; Nm. 28:19-23). 

    Levítico 23:8 

    8 Y ofreceréis a Jehová siete días ofrenda encendida; el séptimo día será santa convocación; ningún trabajo de siervo haréis.

    Números 28:19-23

    19 Y ofreceréis como ofrenda encendida en holocausto a Jehová, dos becerros de la vacada, y un carnero, y siete corderos de un año; serán sin defecto.

    20 Y su ofrenda de harina amasada con aceite: tres décimas con cada becerro, y dos décimas con cada carnero;

    21 y con cada uno de los siete corderos ofreceréis una décima.

    22 Y un macho cabrío por expiación, para reconciliaros.

    23 Esto ofreceréis además del holocausto de la mañana, que es el holocausto continuo.

    El pan a comer durante estos siete días tenía que estar exento de levadura. La noche de la primera pascua no había levadura en la casa de los israelitas, que partieron precipitadamente, llevándose consigo masa sin levadura (Éx. 12:8, 34, 39). 

    Éxodo 12:8, 34, 39

    8 Y aquella noche comerán la carne asada al fuego, y panes sin levadura; con hierbas amargas lo comerán.

    34 Y llevó el pueblo su masa antes que se leudase, sus masas envueltas en sus sábanas sobre sus hombros.

    39 Y cocieron tortas sin levadura de la masa que habían sacado de Egipto, pues no había leudado, porque al echarlos fuera los egipcios, no habían tenido tiempo ni para prepararse comida.

    El pan ázimo, símbolo de pureza y verdad, recordaba esta huida precipitada de Egipto (Dt. 16:3; 1 Co. 5:8). 

    Deuteronomio 16:3 

    3 No comerás con ella pan con levadura; siete días comerás con ella pan sin levadura, pan de aflicción, porque aprisa saliste de tierra de Egipto; para que todos los días de tu vida te acuerdes del día en que saliste de la tierra de Egipto.

    1 Corintios 5:8

    8 Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad.

    La Biblia menciona la celebración de la pascua: en el Sinaí (Nm. 9:1-14), durante la entrada en Canaán (Jos. 5:11), bajo Ezequías (2 Cr. 30:1-27; los vv. 5, 26 hacen alusión a Salomón); bajo Josías (2 R. 23:21-23; 2 Cr. 35:1-19), en la época de Esdras (Esd. 6:19-22

    Números 9:1-14

    Celebración de la pascua

    1 Habló Jehová a Moisés en el desierto de Sinaí, en el segundo año de su salida de la tierra de Egipto, en el mes primero, diciendo:

    2 Los hijos de Israel celebrarán la pascua a su tiempo.

    3 El decimocuarto día de este mes, entre las dos tardes, la celebraréis a su tiempo; conforme a todos sus ritos y conforme a todas sus leyes la celebraréis.

    4 Y habló Moisés a los hijos de Israel para que celebrasen la pascua.

    5 Celebraron la pascua en el mes primero, a los catorce días del mes, entre las dos tardes, en el desierto de Sinaí; conforme a todas las cosas que mandó Jehová a Moisés, así hicieron los hijos de Israel.

    6 Pero hubo algunos que estaban inmundos a causa de muerto, y no pudieron celebrar la pascua aquel día; y vinieron delante de Moisés y delante de Aarón aquel día,

    7 y le dijeron aquellos hombres: Nosotros estamos inmundos por causa de muerto; ¿por qué seremos impedidos de ofrecer ofrenda a Jehová a su tiempo entre los hijos de Israel?

    8 Y Moisés les respondió: Esperad, y oiré lo que ordena Jehová acerca de vosotros.

    9 Y Jehová habló a Moisés, diciendo:

    10 Habla a los hijos de Israel, diciendo: Cualquiera de vosotros o de vuestros descendientes, que estuviere inmundo por causa de muerto o estuviere de viaje lejos, celebrará la pascua a Jehová.

    11 En el mes segundo, a los catorce días del mes, entre las dos tardes, la celebrarán; con panes sin levadura y hierbas amargas la comerán.

    12 No dejarán del animal sacrificado para la mañana, ni quebrarán hueso de él; conforme a todos los ritos de la pascua la celebrarán.

    13 Mas el que estuviere limpio, y no estuviere de viaje, si dejare de celebrar la pascua, la tal persona será cortada de entre su pueblo; por cuanto no ofreció a su tiempo la ofrenda de Jehová, el tal hombre llevará su pecado.

    14 Y si morare con vosotros extranjero, y celebrare la pascua a Jehová, conforme al rito de la pascua y conforme a sus leyes la celebrará; un mismo rito tendréis, tanto el extranjero como el natural de la tierra.

    Josué 5:11

    11 Al otro día de la pascua comieron del fruto de la tierra, los panes sin levadura, y en el mismo día espigas nuevas tostadas.

    2 Crónicas 30:1-27

    Ezequías celebra la pascua

    1 Envió después Ezequías por todo Israel y Judá, y escribió cartas a Efraín y a Manasés, para que viniesen a Jerusalén a la casa de Jehová para celebrar la pascua a Jehová Dios de Israel.

    2 Y el rey había tomado consejo con sus príncipes, y con toda la congregación en Jerusalén , para celebrar la pascua en el mes segundo:

    3 Porque entonces no la podían celebrar, por cuanto no había suficientes sacerdotes santificados, ni el pueblo se había reunido en Jerusalén.

    4 Esto agradó al rey y a toda la multitud.

    5 Y determinaron hacer pasar pregón por todo Israel, desde Beerseba hasta Dan, para que viniesen a celebrar la pascua a Jehová Dios de Israel, en Jerusalén : porque en mucho tiempo no la habían celebrado al modo que está escrito.

    6 Fueron pues correos con cartas de mano del rey y de sus príncipes por todo Israel y Judá, como el rey lo había mandado, y decían: Hijos de Israel, volveos a Jehová el Dios de Abraham, de Isaac, y de Israel, y él se volverá al remanente que ha quedado de la mano de los reyes de Asiria.

    7 No seáis como vuestros padres y como vuestros hermanos, que se rebelaron contra Jehová el Dios de sus padres, y él los entregó a desolación, como vosotros veis.

    8 No endurezcáis, pues, ahora vuestra cerviz como vuestros padres; someteos a Jehová, y venid a su santuario, el cual él ha santificado para siempre; y servid a Jehová vuestro Dios, y el ardor de su ira se apartará de vosotros.

    9 Porque si os volviereis a Jehová, vuestros hermanos y vuestros hijos hallarán misericordia delante de los que los tienen cautivos, y volverán a esta tierra: porque Jehová vuestro Dios es clemente y misericordioso, y no apartará de vosotros su rostro, si vosotros os volviereis a él.

    10 Pasaron, pues, los correos de ciudad en ciudad por la tierra de Efraín y Manasés, hasta Zabulón: mas se reían y burlaban de ellos.

    11 Con todo eso, algunos hombres de Aser, de Manasés, y de Zabulón, se humillaron, y vinieron a Jerusalén.

    12 En Judá también estuvo la mano de Dios para darles un solo corazón para cumplir el mensaje del rey y de los príncipes, conforme a la palabra de Jehová.

    13 Y se reunió en Jerusalén mucha gente para celebrar la fiesta solemne de los panes sin levadura en el mes segundo, una vasta reunión.

    14 Y levantándose, quitaron los altares que había en Jerusalén ; quitaron también todos los altares de incienso, y los echaron al torrente de Cedrón.

    15 Entonces sacrificaron la pascua, a los catorce días del mes segundo; y los sacerdotes y los levitas llenos de vergüenza se santificaron, y trajeron los holocaustos a la casa de Jehová.

    16 Y tomaron su lugar en los turnos de costumbre, conforme a la ley de Moisés varón de Dios; y los sacerdotes esparcían la sangre que recibían de manos de los levitas:

    17 Porque había muchos en la congregación que no estaban santificados, y por eso los levitas sacrificaban la pascua por todos los que no se habían purificado, para santificarlos a Jehová.

    18 Porque una gran multitud del pueblo de Efraín y Manasés, y de Isacar y Zabulón, no se habían purificado, y comieron la pascua no conforme a lo que está escrito. Mas Ezequías oró por ellos, diciendo: Jehová, que es bueno, sea propicio a todo aquel que ha preparado su corazón para buscar a Dios,

    19 a Jehová el Dios de sus padres, aunque no esté purificado según los ritos de purificación del santuario.

    20 Y oyó Jehová a Ezequías, y sanó al pueblo.

    21 Así los hijos de Israel que estaban en Jerusalén celebraron la fiesta solemne de los panes sin levadura por siete días con grande gozo: y glorificaban a Jehová todos los días los levitas y los sacerdotes, cantando con instrumentos resonantes a Jehová.

    22 Y habló Ezequías al corazón de todos los levitas que tenían buena inteligencia en el servicio de Jehová. Y comieron de lo sacrificado en la fiesta solemne por siete días, ofreciendo sacrificios de paz, y dando gracias a Jehová el Dios de sus padres.

    23 Y toda aquella asamblea determinó que celebrasen la fiesta por otros siete días; y la celebraron otros siete días con alegría.

    24 Porque Ezequías rey de Judá había dado a la asamblea mil novillos y siete mil ovejas; y también los príncipes dieron al pueblo mil novillos y diez mil ovejas: y muchos sacerdotes ya se habían santificado.

    25 Se alegró, pues, toda la congregación de Judá, como también los sacerdotes y levitas, y toda la multitud que había venido de Israel; asimismo los forasteros que habían venido de la tierra de Israel, y los que habitaban en Judá.

    26 Hubo entonces gran regocijo en Jerusalén; porque desde los días de Salomón hijo de David rey de Israel, no había habido cosa semejante en Jerusalén.

    27 Después los sacerdotes y levitas, puestos en pie, bendijeron al pueblo: y la voz de ellos fue oída, y su oración llegó a la habitación de su santuario, al cielo.

    2 Reyes 23:21-23 

    Josías celebra la pascua

    21 Entonces mandó el rey a todo el pueblo, diciendo: Haced la pascua a Jehová vuestro Dios, conforme a lo que está escrito en el libro de este pacto.

    22 No había sido hecha tal pascua desde los tiempos en que los jueces gobernaban a Israel, ni en todos los tiempos de los reyes de Israel y de los reyes de Judá.

    23 A los dieciocho años del rey Josías fue hecha aquella pascua a Jehová en Jerusalén.

    2 Crónicas 35:1-19

    Josías celebra la pascua

    1 Josías celebró la pascua a Jehová en Jerusalén , y sacrificaron la pascua a los catorce días del mes primero.

    2 Puso también a los sacerdotes en sus oficios, y los confirmó en el ministerio de la casa de Jehová.

    3 Y dijo a los levitas que enseñaban a todo Israel, y que estaban dedicados a Jehová: Poned el arca santa en la casa que edificó Salomón hijo de David, rey de Israel, para que no la carguéis más sobre los hombros. Ahora servid a Jehová vuestro Dios, y a su pueblo Israel.

    4 Preparaos según las familias de vuestros padres, por vuestros turnos, como lo ordenaron David rey de Israel y Salomón su hijo.

    5 Estad en el santuario según la distribución de las familias de vuestros hermanos los hijos del pueblo, y según la distribución de la familia de los levitas.

    6 Sacrificad luego la pascua; y después de santificaros, preparad a vuestros hermanos, para que hagan conforme a la palabra de Jehová dada por medio de Moisés.

    7 Y dio el rey Josías a los del pueblo ovejas, corderos, y cabritos de los rebaños, en número de treinta mil, y tres mil bueyes, todo para la pascua, para todos los que se hallaron presentes; esto de la hacienda del rey.

    8 También sus príncipes dieron con liberalidad al pueblo y a los sacerdotes y levitas. Hilcías, Zacarías y Jehiel, oficiales de la casa de Dios, dieron a los sacerdotes, para celebrar la pascua, dos mil seiscientas ovejas, y trescientos bueyes.

    9 Asimismo Conanías, y Semaías y Natanael sus hermanos, y Hasabías, Jeiel, y Josabad, jefes de los levitas, dieron a los levitas, para los sacrificios de la pascua, cinco mil ovejas y quinientos bueyes.

    10 Preparado así el servicio, los sacerdotes se colocaron en sus puestos, y asimismo los levitas en sus turno, conforme al mandamiento del rey.

    11 Y sacrificaron la pascua; y esparcían los sacerdotes la sangre recibida de mano de los levitas, y los levitas desollaban las víctimas.

    12 Tomaron luego del holocausto, para dar conforme a los repartimientos de las familias del pueblo, a fin de que ofreciesen a Jehová según está escrito en el libro de Moisés; y asimismo tomaron de los bueyes.

    13 Y asaron la pascua al fuego conforme a la ordenanza; mas lo que había sido santificado lo cocieron en ollas, en calderos y sartenes, y lo repartieron rápidamente a todo el pueblo.

    14 Después prepararon para ellos mismos y para los sacerdotes; porque los sacerdotes, hijos de Aarón, estuvieron ocupados hasta la noche en el sacrificio de los holocaustos y de las grosuras; por tanto, los levitas prepararon para ellos mismos y para los sacerdotes hijos de Aarón.

    15 Asimismo los cantores hijos de Asaf estaban en su puesto, conforme al mandamiento de David, de Asaf y de Hemán, y de Jedutún vidente del rey; también los porteros estaban a cada puerta; y no era necesario que se apartasen de su ministerio, porque sus hermanos los levitas preparaban para ellos.

    16 Así fue preparado todo el servicio de Jehová en aquel día, para celebrar la pascua, y para sacrificar los holocaustos sobre el altar de Jehová, conforme al mandamiento del rey Josías.

    17 Y los hijos de Israel que estaban allí, celebraron la pascua en aquel tiempo, y la fiesta solemne de los panes sin levadura por siete días.

    18 Nunca fue celebrada una pascua como esta en Israel desde los días de Samuel el profeta; ni ningún rey de Israel celebró pascua tal como la que celebró el rey Josías, con los sacerdotes y levitas, y todo Judá e Israel, los que se hallaron allí, juntamente con los moradores de Jerusalén.

    19 Esta pascua fue celebrada en el año dieciocho del rey Josías.

    Esdras 6:19-22

    19 También los hijos de la cautividad celebraron la pascua a los catorce días del mes primero.

    20 Porque los sacerdotes y los levitas se habían purificado a una; todos estaban limpios, y sacrificaron la pascua por todos los hijos de la cautividad, y por sus hermanos los sacerdotes, y por sí mismos.

    21 Comieron los hijos de Israel que habían vuelto del cautiverio, con todos aquellos que se habían apartado de las inmundicias de las gentes de la tierra para buscar a Jehová Dios de Israel.

    22 Y celebraron con regocijo la fiesta solemne de los panes sin levadura siete días, por cuanto Jehová los había alegrado, y había vuelto el corazón del rey de Asiria hacia ellos, para fortalecer sus manos en la obra de la casa de Dios, del Dios de Israel.

    Véanse también Mt. 26: 17 ss.; Mr. 14:12 ss.; Lc. 22:7 ss.; Jn. 18:28; Ant. 17:9, 3; 20:5, 3; Guerras 6:9, 3). 

    Mateo 26:17

    Institución de la Cena del Señor

    17 El primer día de la fiesta de los panes sin levadura, vinieron los discípulos a Jesús, diciéndole: ¿Dónde quieres que preparemos para que comas la pascua?

    Marcos 14:12

    Institución de la Cena del Señor

    12 El primer día de la fiesta de los panes sin levadura, cuando sacrificaban el cordero de la pascua, sus discípulos le dijeron: ¿Dónde quieres que vayamos a preparar para que comas la pascua?

    Lucas 22:7 

    Institución de la Cena del Señor

    7 Llegó el día de los panes sin levadura, en el cual era necesario sacrificar el cordero de la pascua.

    Juan 18:28

    Jesús ante Pilato

    28 Llevaron a Jesús de casa de Caifás al pretorio. Era de mañana, y ellos no entraron en el pretorio para no contaminarse, y así poder comer la pascua.

    Es evidente que el término «pascua» se aplicaba a la Fiesta de los panes sin levadura, como en Dt. 16:2, 3: «Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas... no comerás con ella pan con levadura; siete días comerás con ella pan sin levadura, pan de aflicción...» 

    Deuteronomio 16:2, 3

    2 Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas, en el lugar que Jehová escogiere para que habite allí su nombre.

    3 No comerás con ella pan con levadura; siete días comerás con ella pan sin levadura, pan de aflicción, porque aprisa saliste de tierra de Egipto; para que todos los días de tu vida te acuerdes del día en que saliste de la tierra de Egipto.

    Es evidente que el término «pascua», aplicado a las vacas, se refiere a la fiesta de los panes sin levadura; además, se afirma que «comerás con ella (refiriéndose evidentemente a 'la pascua') siete días pan sin levadura». 

    Esto explica a la perfección la mención de Juan (Jn. 18:28) de que los judíos rehusaron entrar en el pretorio «para no contaminarse, y así poder comer la pascua». 

    Juan 18:28

    Jesús ante Pilato

    28 Llevaron a Jesús de casa de Caifás al pretorio. Era de mañana, y ellos no entraron en el pretorio para no contaminarse, y así poder comer la pascua.

    Se ha pretendido en ciertos medios «críticos» que hay contradicción entre Juan y los Evangelios Sinópticos, por cuanto éstos sitúan la Última Cena en el día marcado por la Ley, en tanto que Juan indicaría que el Señor adelantó la celebración de la Pascua un día, muriendo el día en que se sacrificaba el cordero pascual. 

    Pero esta idea es errónea, evidenciando ignorancia del hecho que en el judaísmo se conocía como pascua todo el período de siete días, y de que por «comer la pascua» se entendía en un sentido general participar de los sacrificios ofrecidos durante los siete días de la pascua (cfr. Anderson, Sir R.: «El Príncipe que ha de venir», el capítulo «La cena pascual», PP. 127-135). 

    (b) El cordero o cabrito inmolado en la fiesta de la pascua (Éx. 12:21; Dt. 16:2; 2 Cr. 30:17). 

    Éxodo 12:21 

    21 Y Moisés convocó a todos los ancianos de Israel, y les dijo: Sacad y tomaos corderos por vuestras familias, y sacrificad la pascua.

    Deuteronomio 16:2 

    2 Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas, en el lugar que Jehová escogiere para que habite allí su nombre.

    2 Crónicas 30:17

    17 Porque había muchos en la congregación que no estaban santificados, y por eso los levitas sacrificaban la pascua por todos los que no se habían purificado, para santificarlos a Jehová.

    Cristo es nuestra pascua (1 Co. 5:7). 

    1 Corintios 5:7

    7 Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.

    Él fue sin tacha alguna, como el cordero pascual (cfr. Éx. 12:5; 1 P. 1:18, 19); ninguno de Sus huesos fue quebrantado (cfr. Éx. 12:46 con Jn. 19:36); 

    Éxodo 12:5 

    5 El animal será sin defecto, macho de un año; lo tomaréis de las ovejas o de las cabras.

    1 Pedro 1:18, 19

    18 sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata,

    19 sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación,

    Éxodo 12:46

    46 Se comerá en una casa, y no llevarás de aquella carne fuera de ella, ni quebraréis hueso suyo.

    Juan 19:36

    36 Porque estas cosas sucedieron para que se cumpliese la Escritura: No será quebrado hueso suyo.

    Su sangre fue nuestra redención ante Dios (Éx. 12:13). «Nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros. 

    Éxodo 12:13

    13 Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto.

    Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad» (1 Co. 5:7, 8). 

    1 Corintios 5:7, 8

    7 Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.

    8 Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad.

    El pan sin levadura exhibe aquel sentido de la gracia por medio de la fe, en el que, aparte de las influencias negativas que pueda sufrir por la carne y viejas asociaciones, puede el cristiano estar habitualmente en comunión con el sacrificio de Cristo, de manera que toda su vida sea coherente con todo lo que ello comporta. 

    Bibliografía: 

    Anderson, Sir R.: «El Príncipe que ha de venir» (Pub. Portavoz Evangélico, Barcelona, 1980), 

    Anderson, Sir R.: «The Gospel and its Ministry» (Kregel Publications, Grand Rapids, 1978), 

    Anderson, Sir R.: «Redemption Truths» (Kregel Publications, 1980); 

    anónimo: «Las siete fiestas de Jehová» (Editorial «Las Buenas Nuevas», Montebello, California 1968) 

    Darby J. N.: «The blood of the Lamb» en Bible Treasury dic 1875 (reimpres 1969 H. L. Heijkoop, Winschoten, Holanda), 

    Edersheim A.: «The Life and Times of Jesus the Messiah» (Wm. Eerdmans, Grand Rapids, reimpr. 1981) 

    Edersheim A.: « The Temple, its Ministry and Services as they were at the time of Christ» (Eerdmans, reimpr. 1983) 

    Edersheim A.: «Old Testament Bible History (Eerdmans, reimpr., 1984); 

    Mackintosh, C. H.: «Éxodo» (Ed. «Las Buenas Nuevas», 1960).

    VÉASE: Fiestas , Pentecostés o fiesta de las semanas
  • DICCIONARIO
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  • Pascua
    (término derivado del heb. «pesach», de «pasar de»: cfr. Éx. 12:13, 22, 27; Ant. 2:14, 6). 

    Éxodo 12:13, 22, 27 

    13 Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto.

    22 Y tomad un manojo de hisopo, y mojadlo en la sangre que estará en un lebrillo, y untad el dintel y los dos postes con la sangre que estará en el lebrillo; y ninguno de vosotros salga de las puertas de su casa hasta la mañana.

    27 vosotros responderéis: Es la víctima de la pascua de Jehová, el cual pasó por encima de las casas de los hijos de Israel en Egipto, cuando hirió a los egipcios, y libró nuestras casas. Entonces el pueblo se inclinó y adoró.

    (a) La primera de las tres solemnidades anuales en las que todo varón israelita no impedido se debía presentar en el Templo (Éx. 12:43; Dt. 16:1). 

    Éxodo 12:43 

    43 Y Jehová dijo a Moisés y a Aarón: Esta es la ordenanza de la pascua; ningún extraño comerá de ella.

    Deuteronomio 16:1

    Fiestas anuales

    1 Guardarás el mes de Abib, y harás pascua a Jehová tu Dios; porque en el mes de Abib te sacó Jehová tu Dios de Egipto, de noche.

    Fue instituida en Egipto con el fin de conmemorar el acontecimiento fundamental de la liberación de los israelitas (Éx. 12:1, 14, 42; 23:15; Dt. 16:1, 2). 

    Éxodo 12:1, 14, 42 

    La Pascua

    1 Habló Jehová a Moisés y a Aarón en la tierra de Egipto, diciendo:

    14 Y este día os será en memoria, y lo celebraréis como fiesta solemne para Jehová durante vuestras generaciones; por estatuto perpetuo lo celebraréis.

    42 Es noche de guardar para Jehová, por haberlos sacado en ella de la tierra de Egipto. Esta noche deben guardarla para Jehová todos los hijos de Israel en sus generaciones.

    Éxodo 23:15 

    15 La fiesta de los panes sin levadura guardarás. Siete días comerás los panes sin levadura, como yo te mandé, en el tiempo del mes de Abib, porque en él saliste de Egipto; y ninguno se presentará delante de mí con las manos vacías.

    Deuteronomio 16:1, 2

    Fiestas anuales

    1 Guardarás el mes de Abib, y harás pascua a Jehová tu Dios; porque en el mes de Abib te sacó Jehová tu Dios de Egipto, de noche.

    2 Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas, en el lugar que Jehová escogiere para que habite allí su nombre.

    Con ella se celebraba solemnemente el hecho de que Dios, que había hecho morir a todos los primogénitos de la tierra de Egipto, había sin embargo pasado por alto las moradas de los israelitas, marcadas con la sangre del cordero. 

    Debían comerla apresuradamente, con el bastón en la mano, y con la actitud de personas dispuestas a partir en la liberación prometida por Dios. 

    La fiesta comenzaba el día catorce del mes de Abib (Nisán) al atardecer, esto es, al inicio del día quince, con la comida que seguía al sacrificio del cordero (Lv. 23:5). 

    Levítico 23:5

    5 En el mes primero, a los catorce del mes, entre las dos tardes, pascua es de Jehová.

    Se daba muerte a un cordero o a un cabrito entre las dos tardes, cerca del momento del ocaso (Éx. 12:6; Dt. 16:6), o entre las horas novena y undécima (Guerras 6:9, 3). 

    Éxodo 12:6 

    6 Y lo guardaréis hasta el día catorce de este mes, y lo inmolará toda la congregación del pueblo de Israel entre las dos tardes.

    Deuteronomio 16:6

    6 sino en el lugar que Jehová tu Dios escogiere para que habite allí su nombre, sacrificarás la pascua por la tarde a la puesta del sol, a la hora que saliste de Egipto.

    Asado entero, se comía con panes sin levadura y con hierbas amargas (Éx. 12:8). 

    Éxodo 12:8

    8 Y aquella noche comerán la carne asada al fuego, y panes sin levadura; con hierbas amargas lo comerán.

    No podía ser hervido en agua. Su sangre derramada era tipo de la expiación; las hierbas amargas simbolizaban los sufrimientos de la esclavitud en Egipto, y el pan sin levadura representaba la pureza (cfr. Lv. 2:11; 1 Co. 5:7, 8). 

    Levítico 2:11 

    11 Ninguna ofrenda que ofreciereis a Jehová será con levadura; porque de ninguna cosa leuda, ni de ninguna miel, se ha de quemar ofrenda para Jehová.

    1 Corintios 5:7, 8

    7 Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.

    8 Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad.

    Los israelitas que tomaban parte en este acto de redención constituían el pueblo santo, comunicando gozosamente en presencia del Dios invisible. 

    La participación en la cena pascual era obligatoria sólo para los varones, aunque las mujeres tenían derecho a participar, así como toda la casa. 

    Si la familia era poco numerosa, podían juntarse vecinos con ellos para comer todo el cordero (Éx. 12:4). 

    Éxodo 12:4

    4 Mas si la familia fuere tan pequeña que no baste para comer el cordero, entonces él y su vecino inmediato a su casa tomarán uno según el número de las personas; conforme al comer de cada hombre, haréis la cuenta sobre el cordero.

    La pascua expone en tipo la ofrenda de Cristo como aquello en lo que se ha declarado la justicia de Dios con respecto al pecado. 

    La sangre del cordero era un testimonio de muerte, esto es, de la eliminación a los ojos de Dios del hombre en su pecado contra Él. 

    Esta eliminación tuvo lugar vicariamente en la persona del Justo, que se dio a Sí mismo como rescate por todos. 

    Al comer el cordero asado al fuego (emblema de juicio), el pueblo se asociaba en aquello que había tenido lugar en tipo. El Señor Jesús deseó vivamente comer la última pascua con Sus discípulos, por cuanto formaban todos un singular círculo «familiar». 

    Esta pascua estaba a punto de ser cumplida en Cristo mismo, que tomaba Su lugar de separación de la tierra hasta el advenimiento del reino de Dios (Lc. 22:15-18). 

    Lucas 22:15-18

    15 Y les dijo: ¡Cuánto he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca!

    16 Porque os digo que no la comeré más, hasta que se cumpla en el reino de Dios.

    17 Y habiendo tomado la copa, dio gracias, y dijo: Tomad esto, y repartidlo entre vosotros;

    18 porque os digo que no beberé más del fruto de la vid, hasta que el reino de Dios venga.

    Manera de comer la Pascua. Las autoridades judías señalan que la manera de comer la pascua en la época del Señor era la siguiente: 

    (A) Cuando todos estaban en su lugar, el presidente de la fiesta daba las gracias, y todos bebían entonces de la primera copa de vino mezclado con agua. 

    (B) Todos se lavaban las manos. 

    (C) Se preparaba la mesa con el cordero pascual, panes sin levadura, hierbas amargas, y un plato de salsa espesa (con la que se decía simbolizar el mortero con el que hacían los ladrillos en Egipto). 

    (D) Todos mojaban una parte de las hierbas amargas en la salsa, y la comían. 

    (E) Se sacaban los platos de la mesa, y los niños o prosélitos recibían instrucción acerca del significado de la fiesta. 

    (F) Después se volvían a traer los platos, y el presidente decía: «Ésta es la pascua que comemos, porque el Señor pasó por alto las casas de nuestros padres en Egipto.» Sosteniendo en alto las hierbas amargas, decía a continuación: «Éstas son las hierbas amargas que comemos en memoria de que los egipcios amargaron la vida de nuestros padres en Egipto.» Después se refería al pan sin levadura, y repetía los salmos 113 y 114, finalizando con una oración. Todos bebían entonces la segunda copa de vino. 

    Salmos 113

    Dios levanta al pobre

    1 Alabad, siervos de Jehová, Alabad el nombre de Jehová.

    2 Sea el nombre de Jehová bendito Desde ahora y para siempre.

    3 Desde el nacimiento del sol hasta donde se pone, Sea alabado el nombre de Jehová.

    4 Excelso sobre todas las naciones es Jehová, Sobre los cielos su gloria.

    5 ¿Quién como Jehová nuestro Dios, Que se sienta en las alturas,

    6 Que se humilla a mirar En el cielo y en la tierra?

    7 El levanta del polvo al pobre, Y al menesteroso alza del muladar,

    8 Para hacerlos sentar con los príncipes, Con los príncipes de su pueblo.

    9 El hace habitar en familia a la estéril, Que se goza en ser madre de hijos. Aleluya.

    Salmos 114

    Las maravillas del Exodo

    1 Cuando salió Israel de Egipto, La casa de Jacob del pueblo extranjero,

    2 Judá vino a ser su santuario, E Israel su señorío.

    3 El mar lo vio, y huyó; El Jordán se volvió atrás.

    4 Los montes saltaron como carneros, Los collados como corderitos.

    5 ¿Qué tuviste, oh mar, que huiste? ¿Y tú, oh Jordán, que te volviste atrás?

    6 Oh montes, ¿por qué saltasteis como carneros, Y vosotros, collados, como corderitos?

    7 A la presencia de Jehová tiembla la tierra, A la presencia del Dios de Jacob,

    8 El cual cambió la peña en estanque de aguas, Y en fuente de aguas la roca.

    (G) El presidente rompía uno de los panes sin levadura, y daba las gracias. 

    (H) Todos participaban entonces del cordero pascual. 

    (I) Para finalizar la cena, todos tomaban un trozo de pan con algo de hierbas amargas, y, habiéndolo mojado en la salsa, se lo comían. 

    (J) Bebían entonces la tercera copa de vino, llamada «copa de bendición». 

    (K) El presidente pronunciaba entonces los Sal. 115, 116, 117 y 118, y con otra copa de vino finalizaba la fiesta. 

    Salmos 115

    Dios y los ídolos

    1 No a nosotros, oh Jehová, no a nosotros, Sino a tu nombre da gloria, Por tu misericordia, por tu verdad.

    2 ¿Por qué han de decir las gentes: ¿Dónde está ahora su Dios?

    3 Nuestro Dios está en los cielos; Todo lo que quiso ha hecho.

    4 Los ídolos de ellos son plata y oro, Obra de manos de hombres.

    5 Tienen boca, mas no hablan; Tienen ojos, mas no ven;

    6 Orejas tienen, mas no oyen; Tienen narices, mas no huelen;

    7 Manos tienen, mas no palpan; Tienen pies, mas no andan; No hablan con su garganta.

    8 Semejantes a ellos son los que los hacen, Y cualquiera que confía en ellos.

    9 Oh Israel, confía en Jehová; El es tu ayuda y tu escudo.

    10 Casa de Aarón, confiad en Jehová; El es vuestra ayuda y vuestro escudo.

    11 Los que teméis a Jehová, confiad en Jehová; El es vuestra ayuda y vuestro escudo.

    12 Jehová se acordó de nosotros; nos bendecirá; Bendecirá a la casa de Israel; Bendecirá a la casa de Aarón.

    13 Bendecirá a los que temen a Jehová, A pequeños y a grandes.

    14 Aumentará Jehová bendición sobre vosotros; Sobre vosotros y sobre vuestros hijos.

    15 Benditos vosotros de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra.

    16 Los cielos son los cielos de Jehová; Y ha dado la tierra a los hijos de los hombres.

    17 No alabarán los muertos a JAH, Ni cuantos descienden al silencio;

    18 Pero nosotros bendeciremos a JAH Desde ahora y para siempre. Aleluya.

    Salmos 116

    Acción de gracias por haber sido librado de la muerte

    1 Amo a Jehová, pues ha oído Mi voz y mis súplicas;

    2 Porque ha inclinado a mí su oído; Por tanto, le invocaré en todos mis días.

    3 Me rodearon ligaduras de muerte, Me encontraron las angustias del Seol; Angustia y dolor había yo hallado.

    4 Entonces invoqué el nombre de Jehová, diciendo: Oh Jehová, libra ahora mi alma.

    5 Clemente es Jehová, y justo; Sí, misericordioso es nuestro Dios.

    6 Jehová guarda a los sencillos; Estaba yo postrado, y me salvó.

    7 Vuelve, oh alma mía, a tu reposo, Porque Jehová te ha hecho bien.

    8 Pues tú has librado mi alma de la muerte, Mis ojos de lágrimas, Y mis pies de resbalar.

    9 Andaré delante de Jehová En la tierra de los vivientes.

    10 Creí; por tanto hablé, Estando afligido en gran manera.

    11 Y dije en mi apresuramiento: Todo hombre es mentiroso.

    12 ¿Qué pagaré a Jehová Por todos sus beneficios para conmigo?

    13 Tomaré la copa de la salvación, E invocaré el nombre de Jehová.

    14 Ahora pagaré mis votos a Jehová Delante de todo su pueblo.

    15 Estimada es a los ojos de Jehová La muerte de sus santos.

    16 Oh Jehová, ciertamente yo soy tu siervo, Siervo tuyo soy, hijo de tu sierva; Tú has roto mis prisiones.

    17 Te ofreceré sacrificio de alabanza, E invocaré el nombre de Jehová.

    18 A Jehová pagaré ahora mis votos Delante de todo su pueblo,

    19 En los atrios de la casa de Jehová, En medio de ti, oh Jerusalén. Aleluya.

    Salmos 117

    Alabanza por la misericordia de Jehová

    1 Alabad a Jehová, naciones todas; Pueblos todos, alabadle.

    2 Porque ha engrandecido sobre nosotros su misericordia, Y la fidelidad de Jehová es para siempre. Aleluya.

    Salmos 118

    Acción de gracias por la salvación recibida de Jehová

    1 Alabad a Jehová, porque él es bueno; Porque para siempre es su misericordia.

    2 Diga ahora Israel, Que para siempre es su misericordia.

    3 Diga ahora la casa de Aarón, Que para siempre es su misericordia.

    4 Digan ahora los que temen a Jehová, Que para siempre es su misericordia.

    5 Desde la angustia invoqué a JAH, Y me respondió JAH, poniéndome en lugar espacioso.

    6 Jehová está conmigo; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.

    7 Jehová está conmigo entre los que me ayudan; Por tanto, yo veré mi deseo en los que me aborrecen.

    8 Mejor es confiar en Jehová Que confiar en el hombre.

    9 Mejor es confiar en Jehová Que confiar en príncipes.

    10 Todas las naciones me rodearon; Mas en el nombre de Jehová yo las destruiré.

    11 Me rodearon y me asediaron; Mas en el nombre de Jehová yo las destruiré.

    12 Me rodearon como abejas; se enardecieron como fuego de espinos; Mas en el nombre de Jehová yo las destruiré.

    13 Me empujaste con violencia para que cayese, Pero me ayudó Jehová.

    14 Mi fortaleza y mi cántico es JAH, Y él me ha sido por salvación.

    15 Voz de júbilo y de salvación hay en las tiendas de los justos; La diestra de Jehová hace proezas.

    16 La diestra de Jehová es sublime; La diestra de Jehová hace valentías.

    17 No moriré, sino que viviré, Y contaré las obras de JAH.

    18 Me castigó gravemente JAH, Mas no me entregó a la muerte.

    19 Abridme las puertas de la justicia; Entraré por ellas, alabaré a JAH.

    20 Esta es puerta de Jehová; Por ella entrarán los justos.

    21 Te alabaré porque me has oído, Y me fuiste por salvación.

    22 La piedra que desecharon los edificadores Ha venido a ser cabeza del ángulo.

    23 De parte de Jehová es esto, Y es cosa maravillosa a nuestros ojos.

    24 Este es el día que hizo Jehová; Nos gozaremos y alegraremos en él.

    25 Oh Jehová, sálvanos ahora, te ruego; Te ruego, oh Jehová, que nos hagas prosperar ahora.

    26 Bendito el que viene en el nombre de Jehová; Desde la casa de Jehová os bendecimos.

    27 Jehová es Dios, y nos ha dado luz; Atad víctimas con cuerdas a los cuernos del altar.

    28 Mi Dios eres tú, y te alabaré; Dios mío, te exaltaré.

    29 Alabad a Jehová, porque él es bueno; Porque para siempre es su misericordia.

    Después de la destrucción del Templo de Jerusalén por las tropas de Tito, desapareció la posibilidad de inmolar el cordero en el Templo, por lo que el judaísmo celebra desde entonces la pascua sin la víctima, sin su componente central, que era precisamente el tipo de Aquel a quien ellos rechazaron, y a quien reconocerán cuando venga en gloria (cfr. Zac. 12:9-14 ss.; 14:1-9). 

    Zacarías 12:9-14

    9 Y en aquel día yo procuraré destruir a todas las naciones que vinieren contra Jerusalén.

    10 Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito.

    11 En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén, como el llanto de Hadadrimón en el valle de Meguido.

    12 Y la tierra lamentará, cada linaje aparte; los descendientes de la casa de David por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de la casa de Natán por sí, y sus mujeres por sí;

    13 los descendientes de la casa de Leví por sí, y sus mujeres por sí; los descendientes de Simei por sí, y sus mujeres por sí;

    14 todos los otros linajes, cada uno por sí, y sus mujeres por sí.

    Zacarías 14:1-9

    Jerusalén y las naciones

    1 He aquí, el día de Jehová viene, y en medio de ti serán repartidos tus despojos.

    2 Porque yo reuniré a todas las naciones para combatir contra Jerusalén; y la ciudad será tomada, y serán saqueadas las casas, y violadas las mujeres; y la mitad de la ciudad irá en cautiverio, mas el resto del pueblo no será cortado de la ciudad.

    3 Después saldrá Jehová y peleará con aquellas naciones, como peleó en el día de la batalla.

    4 Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos, que está en frente de Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia el oriente y hacia el occidente, haciendo un valle muy grande; y la mitad del monte se apartará hacia el norte, y la otra mitad hacia el sur.

    5 Y huiréis al valle de los montes, porque el valle de los montes llegará hasta Azal; huiréis de la manera que huisteis por causa del terremoto en los días de Uzías rey de Judá; y vendrá Jehová mi Dios, y con él todos los santos.

    6 Y acontecerá que en ese día no habrá luz clara, ni oscura.

    7 Será un día, el cual es conocido de Jehová, que no será ni día ni noche; pero sucederá que al caer la tarde habrá luz.

    8 Acontecerá también en aquel día, que saldrán de Jerusalén aguas vivas, la mitad de ellas hacia el mar oriental, y la otra mitad hacia el mar occidental, en verano y en invierno.

    9 Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, y uno su nombre.

    Íntimamente relacionada con la pascua había la «Fiesta de los panes sin levadura». 

    La cena pascual era el aspecto característico de esta fiesta, que se prolongaba hasta el día veintiuno del mes (Éx. 12:18; Lv. 23:5, 6; Dt. 16:6, 7). 

    Éxodo 12:18 

    18 En el mes primero comeréis los panes sin levadura, desde el día catorce del mes por la tarde hasta el veintiuno del mes por la tarde.

    Levítico 23:5, 6 

    5 En el mes primero, a los catorce del mes, entre las dos tardes, pascua es de Jehová.

    6 Y a los quince días de este mes es la fiesta solemne de los panes sin levadura a Jehová; siete días comeréis panes sin levadura.

    Deuteronomio 16:6, 7

    6 sino en el lugar que Jehová tu Dios escogiere para que habite allí su nombre, sacrificarás la pascua por la tarde a la puesta del sol, a la hora que saliste de Egipto.

    7 Y la asarás y comerás en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido; y por la mañana regresarás y volverás a tu habitación.

    El día en que los israelitas abandonaron Egipto, Moisés les reveló que la solemnidad de la pascua duraría siete días (Éx. 12:14-20; 13:3-10). 

    Éxodo 12:14-20 

    14 Y este día os será en memoria, y lo celebraréis como fiesta solemne para Jehová durante vuestras generaciones; por estatuto perpetuo lo celebraréis.

    15 Siete días comeréis panes sin levadura; y así el primer día haréis que no haya levadura en vuestras casas; porque cualquiera que comiere leudado desde el primer día hasta el séptimo, será cortado de Israel.

    16 El primer día habrá santa convocación, y asimismo en el séptimo día tendréis una santa convocación; ninguna obra se hará en ellos, excepto solamente que preparéis lo que cada cual haya de comer.

    17 Y guardaréis la fiesta de los panes sin levadura, porque en este mismo día saqué vuestras huestes de la tierra de Egipto; por tanto, guardaréis este mandamiento en vuestras generaciones por costumbre perpetua.

    18 En el mes primero comeréis los panes sin levadura, desde el día catorce del mes por la tarde hasta el veintiuno del mes por la tarde.

    19 Por siete días no se hallará levadura en vuestras casas; porque cualquiera que comiere leudado, así extranjero como natural del país, será cortado de la congregación de Israel.

    20 Ninguna cosa leudada comeréis; en todas vuestras habitaciones comeréis panes sin levadura.

    Éxodo 13:3-10

    3 Y Moisés dijo al pueblo: Tened memoria de este día, en el cual habéis salido de Egipto, de la casa de servidumbre, pues Jehová os ha sacado de aquí con mano fuerte; por tanto, no comeréis leudado.

    4 Vosotros salís hoy en el mes de Abib.

    5 Y cuando Jehová te hubiere metido en la tierra del cananeo, del heteo, del amorreo, del heveo y del jebuseo, la cual juró a tus padres que te daría, tierra que destila leche y miel, harás esta celebración en este mes.

    6 Siete días comerás pan sin leudar, y el séptimo día será fiesta para Jehová.

    7 Por los siete días se comerán los panes sin levadura, y no se verá contigo nada leudado, ni levadura, en todo tu territorio.

    8 Y lo contarás en aquel día a tu hijo, diciendo: Se hace esto con motivo de lo que Jehová hizo conmigo cuando me sacó de Egipto.

    9 Y te será como una señal sobre tu mano, y como un memorial delante de tus ojos, para que la ley de Jehová esté en tu boca; por cuanto con mano fuerte te sacó Jehová de Egipto.

    10 Por tanto, tú guardarás este rito en su tiempo de año en año.

    Les había dado entonces las instrucciones necesarias sólo para la primera noche (Éx. 12:21-23), informándoles que sería un estatuto perpetuo (Éx. 12:24, 25). 

    Éxodo 12:21-23

    21 Y Moisés convocó a todos los ancianos de Israel, y les dijo: Sacad y tomaos corderos por vuestras familias, y sacrificad la pascua.

    22 Y tomad un manojo de hisopo, y mojadlo en la sangre que estará en un lebrillo, y untad el dintel y los dos postes con la sangre que estará en el lebrillo; y ninguno de vosotros salga de las puertas de su casa hasta la mañana.

    23 Porque Jehová pasará hiriendo a los egipcios; y cuando vea la sangre en el dintel y en los dos postes, pasará Jehová aquella puerta, y no dejará entrar al heridor en vuestras casas para herir.

    Éxodo 12:24, 25

    24 Guardaréis esto por estatuto para vosotros y para vuestros hijos para siempre.

    25 Y cuando entréis en la tierra que Jehová os dará, como prometió, guardaréis este rito.

    La presencia de los peregrinos en el santuario central elegido por Jehová para la celebración de la fiesta era obligatoria sólo durante el tiempo de la cena pascual; al día siguiente podían dirigirse a sus propias localidades (Dt. 16:7). 

    Deuteronomio 16:7

    7 Y la asarás y comerás en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido; y por la mañana regresarás y volverás a tu habitación.

    El primer día de la fiesta se correspondía con el día quince del mes, que adquiría el carácter de sábado, lo mismo que el día séptimo de la pascua: en estos días no se debía hacer ninguna obra servil, pues estaban marcados para convocación santa (Éx. 12:16; Lv. 23:7; Nm. 28:18, 25; Éx. 13:6; Dt. 16:8). 

    Éxodo 12:16 

    16 El primer día habrá santa convocación, y asimismo en el séptimo día tendréis una santa convocación; ninguna obra se hará en ellos, excepto solamente que preparéis lo que cada cual haya de comer.

    Levítico 23:7 

    7 El primer día tendréis santa convocación; ningún trabajo de siervos haréis.

    Números 28:18, 25 

    18 El primer día será santa convocación; ninguna obra de siervos haréis.

    25 Y el séptimo día tendréis santa convocación; ninguna obra de siervos haréis.

    Éxodo 13:6 

    6 Siete días comerás pan sin leudar, y el séptimo día será fiesta para Jehová.

    Deuteronomio 16:8

    8 Seis días comerás pan sin levadura, y el séptimo día será fiesta solemne a Jehová tu Dios; no trabajarás en él.

    Al siguiente día de este sábado, el segundo día de la fiesta, el sacerdote mecía delante de Jehová una gavilla de cebada, primicia de la siega: este gesto consagraba el inicio de las cosechas (Lv. 23:10-14; cfr. Jos. 5:10-12; Lv. 23:7, 11 en la LXX; Ant. 3:10, 15). (Véanse FIESTAS Y PENTECOSTÉS.) 

    Levítico 23:10-14 

    10 Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando hayáis entrado en la tierra que yo os doy, y seguéis su mies, traeréis al sacerdote una gavilla por primicia de los primeros frutos de vuestra siega.

    11 Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis aceptos; el día siguiente del día de reposo la mecerá.

    12 Y el día que ofrezcáis la gavilla, ofreceréis un cordero de un año, sin defecto, en holocausto a Jehová.

    13 Su ofrenda será dos décimas de efa de flor de harina amasada con aceite, ofrenda encendida a Jehová en olor gratísimo; y su libación será de vino, la cuarta parte de un hin.

    14 No comeréis pan, ni grano tostado, ni espiga fresca, hasta este mismo día, hasta que hayáis ofrecido la ofrenda de vuestro Dios; estatuto perpetuo es por vuestras edades en dondequiera que habitéis.

    Josué 5:10-12 

    10 Y los hijos de Israel acamparon en Gilgal, y celebraron la pascua a los catorce días del mes, por la tarde, en los llanos de Jericó.

    11 Al otro día de la pascua comieron del fruto de la tierra, los panes sin levadura, y en el mismo día espigas nuevas tostadas.

    12 Y el maná cesó el día siguiente, desde que comenzaron a comer del fruto de la tierra; y los hijos de Israel nunca más tuvieron maná, sino que comieron de los frutos de la tierra de Canaán aquel año.

    Levítico 23:7, 11

    7 El primer día tendréis santa convocación; ningún trabajo de siervos haréis.

    11 Y el sacerdote mecerá la gavilla delante de Jehová, para que seáis aceptos; el día siguiente del día de reposo la mecerá.

    Pero el día del mecimiento de la gavilla no era asimilado a sábado. El año agrícola tenía más relación con la fiesta de las semanas o de pentecostés y con la de los tabernáculos o cabañas que con la pascua. 

    Además de los sacrificios habituales en el Templo, se debían ofrecer en holocausto cotidiano, durante los siete días de solemnidades pascuales, dos becerros, un carnero, siete corderos de un año y, como sacrificio de expiación, un macho cabrío (Lv. 23:8; Nm. 28:19-23). 

    Levítico 23:8 

    8 Y ofreceréis a Jehová siete días ofrenda encendida; el séptimo día será santa convocación; ningún trabajo de siervo haréis.

    Números 28:19-23

    19 Y ofreceréis como ofrenda encendida en holocausto a Jehová, dos becerros de la vacada, y un carnero, y siete corderos de un año; serán sin defecto.

    20 Y su ofrenda de harina amasada con aceite: tres décimas con cada becerro, y dos décimas con cada carnero;

    21 y con cada uno de los siete corderos ofreceréis una décima.

    22 Y un macho cabrío por expiación, para reconciliaros.

    23 Esto ofreceréis además del holocausto de la mañana, que es el holocausto continuo.

    El pan a comer durante estos siete días tenía que estar exento de levadura. La noche de la primera pascua no había levadura en la casa de los israelitas, que partieron precipitadamente, llevándose consigo masa sin levadura (Éx. 12:8, 34, 39). 

    Éxodo 12:8, 34, 39

    8 Y aquella noche comerán la carne asada al fuego, y panes sin levadura; con hierbas amargas lo comerán.

    34 Y llevó el pueblo su masa antes que se leudase, sus masas envueltas en sus sábanas sobre sus hombros.

    39 Y cocieron tortas sin levadura de la masa que habían sacado de Egipto, pues no había leudado, porque al echarlos fuera los egipcios, no habían tenido tiempo ni para prepararse comida.

    El pan ázimo, símbolo de pureza y verdad, recordaba esta huida precipitada de Egipto (Dt. 16:3; 1 Co. 5:8). 

    Deuteronomio 16:3 

    3 No comerás con ella pan con levadura; siete días comerás con ella pan sin levadura, pan de aflicción, porque aprisa saliste de tierra de Egipto; para que todos los días de tu vida te acuerdes del día en que saliste de la tierra de Egipto.

    1 Corintios 5:8

    8 Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad.

    La Biblia menciona la celebración de la pascua: en el Sinaí (Nm. 9:1-14), durante la entrada en Canaán (Jos. 5:11), bajo Ezequías (2 Cr. 30:1-27; los vv. 5, 26 hacen alusión a Salomón); bajo Josías (2 R. 23:21-23; 2 Cr. 35:1-19), en la época de Esdras (Esd. 6:19-22

    Números 9:1-14

    Celebración de la pascua

    1 Habló Jehová a Moisés en el desierto de Sinaí, en el segundo año de su salida de la tierra de Egipto, en el mes primero, diciendo:

    2 Los hijos de Israel celebrarán la pascua a su tiempo.

    3 El decimocuarto día de este mes, entre las dos tardes, la celebraréis a su tiempo; conforme a todos sus ritos y conforme a todas sus leyes la celebraréis.

    4 Y habló Moisés a los hijos de Israel para que celebrasen la pascua.

    5 Celebraron la pascua en el mes primero, a los catorce días del mes, entre las dos tardes, en el desierto de Sinaí; conforme a todas las cosas que mandó Jehová a Moisés, así hicieron los hijos de Israel.

    6 Pero hubo algunos que estaban inmundos a causa de muerto, y no pudieron celebrar la pascua aquel día; y vinieron delante de Moisés y delante de Aarón aquel día,

    7 y le dijeron aquellos hombres: Nosotros estamos inmundos por causa de muerto; ¿por qué seremos impedidos de ofrecer ofrenda a Jehová a su tiempo entre los hijos de Israel?

    8 Y Moisés les respondió: Esperad, y oiré lo que ordena Jehová acerca de vosotros.

    9 Y Jehová habló a Moisés, diciendo:

    10 Habla a los hijos de Israel, diciendo: Cualquiera de vosotros o de vuestros descendientes, que estuviere inmundo por causa de muerto o estuviere de viaje lejos, celebrará la pascua a Jehová.

    11 En el mes segundo, a los catorce días del mes, entre las dos tardes, la celebrarán; con panes sin levadura y hierbas amargas la comerán.

    12 No dejarán del animal sacrificado para la mañana, ni quebrarán hueso de él; conforme a todos los ritos de la pascua la celebrarán.

    13 Mas el que estuviere limpio, y no estuviere de viaje, si dejare de celebrar la pascua, la tal persona será cortada de entre su pueblo; por cuanto no ofreció a su tiempo la ofrenda de Jehová, el tal hombre llevará su pecado.

    14 Y si morare con vosotros extranjero, y celebrare la pascua a Jehová, conforme al rito de la pascua y conforme a sus leyes la celebrará; un mismo rito tendréis, tanto el extranjero como el natural de la tierra.

    Josué 5:11

    11 Al otro día de la pascua comieron del fruto de la tierra, los panes sin levadura, y en el mismo día espigas nuevas tostadas.

    2 Crónicas 30:1-27

    Ezequías celebra la pascua

    1 Envió después Ezequías por todo Israel y Judá, y escribió cartas a Efraín y a Manasés, para que viniesen a Jerusalén a la casa de Jehová para celebrar la pascua a Jehová Dios de Israel.

    2 Y el rey había tomado consejo con sus príncipes, y con toda la congregación en Jerusalén , para celebrar la pascua en el mes segundo:

    3 Porque entonces no la podían celebrar, por cuanto no había suficientes sacerdotes santificados, ni el pueblo se había reunido en Jerusalén.

    4 Esto agradó al rey y a toda la multitud.

    5 Y determinaron hacer pasar pregón por todo Israel, desde Beerseba hasta Dan, para que viniesen a celebrar la pascua a Jehová Dios de Israel, en Jerusalén : porque en mucho tiempo no la habían celebrado al modo que está escrito.

    6 Fueron pues correos con cartas de mano del rey y de sus príncipes por todo Israel y Judá, como el rey lo había mandado, y decían: Hijos de Israel, volveos a Jehová el Dios de Abraham, de Isaac, y de Israel, y él se volverá al remanente que ha quedado de la mano de los reyes de Asiria.

    7 No seáis como vuestros padres y como vuestros hermanos, que se rebelaron contra Jehová el Dios de sus padres, y él los entregó a desolación, como vosotros veis.

    8 No endurezcáis, pues, ahora vuestra cerviz como vuestros padres; someteos a Jehová, y venid a su santuario, el cual él ha santificado para siempre; y servid a Jehová vuestro Dios, y el ardor de su ira se apartará de vosotros.

    9 Porque si os volviereis a Jehová, vuestros hermanos y vuestros hijos hallarán misericordia delante de los que los tienen cautivos, y volverán a esta tierra: porque Jehová vuestro Dios es clemente y misericordioso, y no apartará de vosotros su rostro, si vosotros os volviereis a él.

    10 Pasaron, pues, los correos de ciudad en ciudad por la tierra de Efraín y Manasés, hasta Zabulón: mas se reían y burlaban de ellos.

    11 Con todo eso, algunos hombres de Aser, de Manasés, y de Zabulón, se humillaron, y vinieron a Jerusalén.

    12 En Judá también estuvo la mano de Dios para darles un solo corazón para cumplir el mensaje del rey y de los príncipes, conforme a la palabra de Jehová.

    13 Y se reunió en Jerusalén mucha gente para celebrar la fiesta solemne de los panes sin levadura en el mes segundo, una vasta reunión.

    14 Y levantándose, quitaron los altares que había en Jerusalén ; quitaron también todos los altares de incienso, y los echaron al torrente de Cedrón.

    15 Entonces sacrificaron la pascua, a los catorce días del mes segundo; y los sacerdotes y los levitas llenos de vergüenza se santificaron, y trajeron los holocaustos a la casa de Jehová.

    16 Y tomaron su lugar en los turnos de costumbre, conforme a la ley de Moisés varón de Dios; y los sacerdotes esparcían la sangre que recibían de manos de los levitas:

    17 Porque había muchos en la congregación que no estaban santificados, y por eso los levitas sacrificaban la pascua por todos los que no se habían purificado, para santificarlos a Jehová.

    18 Porque una gran multitud del pueblo de Efraín y Manasés, y de Isacar y Zabulón, no se habían purificado, y comieron la pascua no conforme a lo que está escrito. Mas Ezequías oró por ellos, diciendo: Jehová, que es bueno, sea propicio a todo aquel que ha preparado su corazón para buscar a Dios,

    19 a Jehová el Dios de sus padres, aunque no esté purificado según los ritos de purificación del santuario.

    20 Y oyó Jehová a Ezequías, y sanó al pueblo.

    21 Así los hijos de Israel que estaban en Jerusalén celebraron la fiesta solemne de los panes sin levadura por siete días con grande gozo: y glorificaban a Jehová todos los días los levitas y los sacerdotes, cantando con instrumentos resonantes a Jehová.

    22 Y habló Ezequías al corazón de todos los levitas que tenían buena inteligencia en el servicio de Jehová. Y comieron de lo sacrificado en la fiesta solemne por siete días, ofreciendo sacrificios de paz, y dando gracias a Jehová el Dios de sus padres.

    23 Y toda aquella asamblea determinó que celebrasen la fiesta por otros siete días; y la celebraron otros siete días con alegría.

    24 Porque Ezequías rey de Judá había dado a la asamblea mil novillos y siete mil ovejas; y también los príncipes dieron al pueblo mil novillos y diez mil ovejas: y muchos sacerdotes ya se habían santificado.

    25 Se alegró, pues, toda la congregación de Judá, como también los sacerdotes y levitas, y toda la multitud que había venido de Israel; asimismo los forasteros que habían venido de la tierra de Israel, y los que habitaban en Judá.

    26 Hubo entonces gran regocijo en Jerusalén; porque desde los días de Salomón hijo de David rey de Israel, no había habido cosa semejante en Jerusalén.

    27 Después los sacerdotes y levitas, puestos en pie, bendijeron al pueblo: y la voz de ellos fue oída, y su oración llegó a la habitación de su santuario, al cielo.

    2 Reyes 23:21-23 

    Josías celebra la pascua

    21 Entonces mandó el rey a todo el pueblo, diciendo: Haced la pascua a Jehová vuestro Dios, conforme a lo que está escrito en el libro de este pacto.

    22 No había sido hecha tal pascua desde los tiempos en que los jueces gobernaban a Israel, ni en todos los tiempos de los reyes de Israel y de los reyes de Judá.

    23 A los dieciocho años del rey Josías fue hecha aquella pascua a Jehová en Jerusalén.

    2 Crónicas 35:1-19

    Josías celebra la pascua

    1 Josías celebró la pascua a Jehová en Jerusalén , y sacrificaron la pascua a los catorce días del mes primero.

    2 Puso también a los sacerdotes en sus oficios, y los confirmó en el ministerio de la casa de Jehová.

    3 Y dijo a los levitas que enseñaban a todo Israel, y que estaban dedicados a Jehová: Poned el arca santa en la casa que edificó Salomón hijo de David, rey de Israel, para que no la carguéis más sobre los hombros. Ahora servid a Jehová vuestro Dios, y a su pueblo Israel.

    4 Preparaos según las familias de vuestros padres, por vuestros turnos, como lo ordenaron David rey de Israel y Salomón su hijo.

    5 Estad en el santuario según la distribución de las familias de vuestros hermanos los hijos del pueblo, y según la distribución de la familia de los levitas.

    6 Sacrificad luego la pascua; y después de santificaros, preparad a vuestros hermanos, para que hagan conforme a la palabra de Jehová dada por medio de Moisés.

    7 Y dio el rey Josías a los del pueblo ovejas, corderos, y cabritos de los rebaños, en número de treinta mil, y tres mil bueyes, todo para la pascua, para todos los que se hallaron presentes; esto de la hacienda del rey.

    8 También sus príncipes dieron con liberalidad al pueblo y a los sacerdotes y levitas. Hilcías, Zacarías y Jehiel, oficiales de la casa de Dios, dieron a los sacerdotes, para celebrar la pascua, dos mil seiscientas ovejas, y trescientos bueyes.

    9 Asimismo Conanías, y Semaías y Natanael sus hermanos, y Hasabías, Jeiel, y Josabad, jefes de los levitas, dieron a los levitas, para los sacrificios de la pascua, cinco mil ovejas y quinientos bueyes.

    10 Preparado así el servicio, los sacerdotes se colocaron en sus puestos, y asimismo los levitas en sus turno, conforme al mandamiento del rey.

    11 Y sacrificaron la pascua; y esparcían los sacerdotes la sangre recibida de mano de los levitas, y los levitas desollaban las víctimas.

    12 Tomaron luego del holocausto, para dar conforme a los repartimientos de las familias del pueblo, a fin de que ofreciesen a Jehová según está escrito en el libro de Moisés; y asimismo tomaron de los bueyes.

    13 Y asaron la pascua al fuego conforme a la ordenanza; mas lo que había sido santificado lo cocieron en ollas, en calderos y sartenes, y lo repartieron rápidamente a todo el pueblo.

    14 Después prepararon para ellos mismos y para los sacerdotes; porque los sacerdotes, hijos de Aarón, estuvieron ocupados hasta la noche en el sacrificio de los holocaustos y de las grosuras; por tanto, los levitas prepararon para ellos mismos y para los sacerdotes hijos de Aarón.

    15 Asimismo los cantores hijos de Asaf estaban en su puesto, conforme al mandamiento de David, de Asaf y de Hemán, y de Jedutún vidente del rey; también los porteros estaban a cada puerta; y no era necesario que se apartasen de su ministerio, porque sus hermanos los levitas preparaban para ellos.

    16 Así fue preparado todo el servicio de Jehová en aquel día, para celebrar la pascua, y para sacrificar los holocaustos sobre el altar de Jehová, conforme al mandamiento del rey Josías.

    17 Y los hijos de Israel que estaban allí, celebraron la pascua en aquel tiempo, y la fiesta solemne de los panes sin levadura por siete días.

    18 Nunca fue celebrada una pascua como esta en Israel desde los días de Samuel el profeta; ni ningún rey de Israel celebró pascua tal como la que celebró el rey Josías, con los sacerdotes y levitas, y todo Judá e Israel, los que se hallaron allí, juntamente con los moradores de Jerusalén.

    19 Esta pascua fue celebrada en el año dieciocho del rey Josías.

    Esdras 6:19-22

    19 También los hijos de la cautividad celebraron la pascua a los catorce días del mes primero.

    20 Porque los sacerdotes y los levitas se habían purificado a una; todos estaban limpios, y sacrificaron la pascua por todos los hijos de la cautividad, y por sus hermanos los sacerdotes, y por sí mismos.

    21 Comieron los hijos de Israel que habían vuelto del cautiverio, con todos aquellos que se habían apartado de las inmundicias de las gentes de la tierra para buscar a Jehová Dios de Israel.

    22 Y celebraron con regocijo la fiesta solemne de los panes sin levadura siete días, por cuanto Jehová los había alegrado, y había vuelto el corazón del rey de Asiria hacia ellos, para fortalecer sus manos en la obra de la casa de Dios, del Dios de Israel.

    Véanse también Mt. 26: 17 ss.; Mr. 14:12 ss.; Lc. 22:7 ss.; Jn. 18:28; Ant. 17:9, 3; 20:5, 3; Guerras 6:9, 3). 

    Mateo 26:17

    Institución de la Cena del Señor

    17 El primer día de la fiesta de los panes sin levadura, vinieron los discípulos a Jesús, diciéndole: ¿Dónde quieres que preparemos para que comas la pascua?

    Marcos 14:12

    Institución de la Cena del Señor

    12 El primer día de la fiesta de los panes sin levadura, cuando sacrificaban el cordero de la pascua, sus discípulos le dijeron: ¿Dónde quieres que vayamos a preparar para que comas la pascua?

    Lucas 22:7 

    Institución de la Cena del Señor

    7 Llegó el día de los panes sin levadura, en el cual era necesario sacrificar el cordero de la pascua.

    Juan 18:28

    Jesús ante Pilato

    28 Llevaron a Jesús de casa de Caifás al pretorio. Era de mañana, y ellos no entraron en el pretorio para no contaminarse, y así poder comer la pascua.

    Es evidente que el término «pascua» se aplicaba a la Fiesta de los panes sin levadura, como en Dt. 16:2, 3: «Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas... no comerás con ella pan con levadura; siete días comerás con ella pan sin levadura, pan de aflicción...» 

    Deuteronomio 16:2, 3

    2 Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas, en el lugar que Jehová escogiere para que habite allí su nombre.

    3 No comerás con ella pan con levadura; siete días comerás con ella pan sin levadura, pan de aflicción, porque aprisa saliste de tierra de Egipto; para que todos los días de tu vida te acuerdes del día en que saliste de la tierra de Egipto.

    Es evidente que el término «pascua», aplicado a las vacas, se refiere a la fiesta de los panes sin levadura; además, se afirma que «comerás con ella (refiriéndose evidentemente a 'la pascua') siete días pan sin levadura». 

    Esto explica a la perfección la mención de Juan (Jn. 18:28) de que los judíos rehusaron entrar en el pretorio «para no contaminarse, y así poder comer la pascua». 

    Juan 18:28

    Jesús ante Pilato

    28 Llevaron a Jesús de casa de Caifás al pretorio. Era de mañana, y ellos no entraron en el pretorio para no contaminarse, y así poder comer la pascua.

    Se ha pretendido en ciertos medios «críticos» que hay contradicción entre Juan y los Evangelios Sinópticos, por cuanto éstos sitúan la Última Cena en el día marcado por la Ley, en tanto que Juan indicaría que el Señor adelantó la celebración de la Pascua un día, muriendo el día en que se sacrificaba el cordero pascual. 

    Pero esta idea es errónea, evidenciando ignorancia del hecho que en el judaísmo se conocía como pascua todo el período de siete días, y de que por «comer la pascua» se entendía en un sentido general participar de los sacrificios ofrecidos durante los siete días de la pascua (cfr. Anderson, Sir R.: «El Príncipe que ha de venir», el capítulo «La cena pascual», PP. 127-135). 

    (b) El cordero o cabrito inmolado en la fiesta de la pascua (Éx. 12:21; Dt. 16:2; 2 Cr. 30:17). 

    Éxodo 12:21 

    21 Y Moisés convocó a todos los ancianos de Israel, y les dijo: Sacad y tomaos corderos por vuestras familias, y sacrificad la pascua.

    Deuteronomio 16:2 

    2 Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas, en el lugar que Jehová escogiere para que habite allí su nombre.

    2 Crónicas 30:17

    17 Porque había muchos en la congregación que no estaban santificados, y por eso los levitas sacrificaban la pascua por todos los que no se habían purificado, para santificarlos a Jehová.

    Cristo es nuestra pascua (1 Co. 5:7). 

    1 Corintios 5:7

    7 Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.

    Él fue sin tacha alguna, como el cordero pascual (cfr. Éx. 12:5; 1 P. 1:18, 19); ninguno de Sus huesos fue quebrantado (cfr. Éx. 12:46 con Jn. 19:36); 

    Éxodo 12:5 

    5 El animal será sin defecto, macho de un año; lo tomaréis de las ovejas o de las cabras.

    1 Pedro 1:18, 19

    18 sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata,

    19 sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación,

    Éxodo 12:46

    46 Se comerá en una casa, y no llevarás de aquella carne fuera de ella, ni quebraréis hueso suyo.

    Juan 19:36

    36 Porque estas cosas sucedieron para que se cumpliese la Escritura: No será quebrado hueso suyo.

    Su sangre fue nuestra redención ante Dios (Éx. 12:13). «Nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros. 

    Éxodo 12:13

    13 Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto.

    Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad» (1 Co. 5:7, 8). 

    1 Corintios 5:7, 8

    7 Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.

    8 Así que celebremos la fiesta, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con panes sin levadura, de sinceridad y de verdad.

    El pan sin levadura exhibe aquel sentido de la gracia por medio de la fe, en el que, aparte de las influencias negativas que pueda sufrir por la carne y viejas asociaciones, puede el cristiano estar habitualmente en comunión con el sacrificio de Cristo, de manera que toda su vida sea coherente con todo lo que ello comporta. 

    Bibliografía: 

    Anderson, Sir R.: «El Príncipe que ha de venir» (Pub. Portavoz Evangélico, Barcelona, 1980), 

    Anderson, Sir R.: «The Gospel and its Ministry» (Kregel Publications, Grand Rapids, 1978), 

    Anderson, Sir R.: «Redemption Truths» (Kregel Publications, 1980); 

    anónimo: «Las siete fiestas de Jehová» (Editorial «Las Buenas Nuevas», Montebello, California 1968) 

    Darby J. N.: «The blood of the Lamb» en Bible Treasury dic 1875 (reimpres 1969 H. L. Heijkoop, Winschoten, Holanda), 

    Edersheim A.: «The Life and Times of Jesus the Messiah» (Wm. Eerdmans, Grand Rapids, reimpr. 1981) 

    Edersheim A.: « The Temple, its Ministry and Services as they were at the time of Christ» (Eerdmans, reimpr. 1983) 

    Edersheim A.: «Old Testament Bible History (Eerdmans, reimpr., 1984); 

    Mackintosh, C. H.: «Éxodo» (Ed. «Las Buenas Nuevas», 1960).

    VÉASE:
    Fiestas , Pentecostés o fiesta de las semanas
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