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  • Castigo eterno

    Esta expresión designa la suerte reservada a los no arrepentidos en el mundo venidero (Mt. 25:46). 

    Mateo 25:46

    46 E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.

    Un término más usado es «infierno» (del lat.: «inferior»); este término aparece en la versión Reina-Valera como traducción de «gehena». Infierno está inspirado en Ef. 4:9 (Cristo descendió a las partes más bajas de la tierra, esto es, la morada de los muertos). 

    Efesios 4:9

    9 Y eso de que subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra?

    No tenía en principio el sentido que se le da comúnmente, y que lo restringe al lugar de tormento, sino que tenía un significado equivalente a «Seol». 

    (a) DESCRIPCIÓN. ¿Dónde hallamos una descripción bíblica del castigo eterno? Entre muchos otros se pueden citar: La vergüenza y confusión perpetua (Dn. 12:2); el fuego de la «gehena» (Mt. 18:9); el fuego que no puede ser apagado (Mr. 9:43); el horno de fuego (Mt. 13:41-42); el lugar de lloro y del crujir de dientes (Mt. 22:13); las tinieblas de afuera (Mt. 8:12); el castigo del fuego eterno (Jud. 7); el lago de fuego (Ap. 20:15), etc. 

    Daniel 12:2

    2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

    Mateo 18:9

    9 Y si tu ojo te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti; mejor te es entrar con un solo ojo en la vida, que teniendo dos ojos ser echado en el infierno de fuego.

    Marcos 9:43

    43 Si tu mano te fuere ocasión de caer, córtala; mejor te es entrar en la vida manco, que teniendo dos manos ir al infierno, al fuego que no puede ser apagado,

    Mateo 13:41-42

    41 Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad,

    42 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Mateo 22:13

    13 Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Mateo 8:12

    12 mas los hijos del reino serán echados a las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Judas 1:7

    7 como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno.

    Apocalipsis 20:15

    15 Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.

    De todas estas expresiones se ve que el castigo eterno es una horrenda realidad. Cierto es que se emplean imágenes: fuego, tinieblas, gusanos, llanto, crujir de dientes, etc. 

    Las Escrituras nos hablan en un lenguaje humano para damos una idea del mundo venidero; pero la descripción que hallamos en ellas es totalmente distinta de las grotescas representaciones de la Edad Media. 

    La idea que domina a todos estos textos es que el castigo eterno consiste en la separación de Dios, con todas sus consecuencias: «Los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder.» Sin embargo, con respecto a las consecuencias de esta exclusión, se tiene que recordar que el castigo eterno caerá sobre la persona completa. 

    Los impíos sufrirán la pena del castigo eterno después de la resurrección de sus cuerpos, por lo que es erróneo insistir excesivamente en que las imágenes anteriores son meros símbolos. Y se tiene que recordar también que las imágenes, símbolos, etc., se usan para expresar una realidad más plena, no menos, que la que tienen los símbolos mismos. 

    Es evidente que las penas del alma serán espirituales; pero no es menos cierto que los impíos resucitados recibirán un castigo que, adecuado a su medida de responsabilidad, recaerá sobre la plenitud de su ser (Mt. 10:28). ¿Qué es la gehena? 

    Mateo 10:28

    28 Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno.

    Este término es la transcripción del término heb. «gé-Hinon», lugar maldito donde ciertos israelitas y sus reyes infieles habían quemado vivos a sus hijos e hijas en honor de Moloc (2 R. 23:10). 

    2 Reyes 23:10

    10 Asimismo profanó a Tofet, que está en el valle del hijo de Hinom, para que ninguno pasase su hijo o su hija por fuego a Moloc.

    Parece que en época de Cristo se quemaban allí las basuras de Jerusalén. Jesús empleó el término de «gehena» para hablar del fuego del infierno, de la manera que las Escrituras usan en el mismo sentido los términos de horno, de tinieblas, de azufre. 

    (b) SUFRIMIENTO. El sufrimiento del infierno. Los textos bíblicos insisten mucho sobre la ignominia, el tormento, el llanto, el crujir de dientes, la tribulación, la angustia, el sufrimiento que sufren los réprobos (Dn. 12:2; Lc. 16:23-24; Mt. 13:42; Ro. 2:8-9; Jud. 7). 

    Daniel 12:2 

    2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

    Lucas 16:23-24 

    23 Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno.

    24 Entonces él, dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua; porque estoy atormentado en esta llama.

    Mateo 13:42 

    42 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Romanos 2:8-9 

    8 pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia;

    9 tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, el judío primeramente y también el griego,

    Judas 1:7

    7 como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno.

    Y el apóstol Juan añade: «Y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche... y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos» (Ap. 14:10-11; 20:10). 

    Apocalipsis 14:10-11 

    10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;

    11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.

    Apocalipsis 20:10

    10 Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.

    ¿Cómo se pueden imaginar tales sufrimientos, y especialmente cómo se pueden conciliar con la concepción de un Dios de amor? Señalemos en primer lugar que la perdición será provocada precisamente por el rechazo del amor de Dios; por otra parte el Señor no habrá de hacer nada para atormentar a los que no quisieron Su salvación, a excepción de alejarlos de Sí (Mt. 25:41). 

    Mateo 25:41

    41 Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.

    ¿Acaso no dijo una vez a los israelitas que, por su incredulidad, habían rehusado entrar en la Tierra Prometida: «Y conoceréis lo que es estar privados de mi presencia»? (Nm. 14:34, Keil-Delitzsch). 

    Números 14:34

    34 Conforme al número de los días, de los cuarenta días en que reconocisteis la tierra, llevaréis vuestras iniquidades cuarenta años, un año por cada día; y conoceréis mi castigo.

    (c) CUANTÍA. El castigo será proporcional a la responsabilidad individual de cada cual. Dios no es injusto, y cada uno de los impíos será juzgado exactamente según sus obras (Ap. 20:12-13; Ec. 12:1, 16; Mt. 12:36; Ro. 2:16; Jud. 14-15). 

    Apocalipsis 20:12-13 

    12 Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.

    13 Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras.

    Mateo 12:36 

    36 Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio.

    Romanos 2:16 

    16 en el día en que Dios juzgará por Jesucristo los secretos de los hombres, conforme a mi evangelio.

    Judas 1:14-15

    14 De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares,

    15 para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de todas sus obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra él.

    La responsabilidad de los culpables será evaluada según la luz recibida, y los que han pecado sin la ley, sin la ley perecerán (Ro. 2:12). 

    Romanos 2:12

    12 Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también perecerán; y todos los que bajo la ley han pecado, por la ley serán juzgados;

    Las ciudades que rechazaron las enseñanzas de Cristo serán juzgadas con mucha mayor severidad que Sodoma y Gomorra (Mt. 10:14-15; 11:20-24). 

    Mateo 10:14-15 

    14 Y si alguno no os recibiere, ni oyere vuestras palabras, salid de aquella casa o ciudad, y sacudid el polvo de vuestros pies.

    15 De cierto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma y de Gomorra, que para aquella ciudad.

    Mateo 11:20-24

    20 Entonces comenzó a reconvenir a las ciudades en las cuales había hecho muchos de sus milagros, porque no se habían arrepentido, diciendo:

    21 Ay de ti, Corazín! Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en vosotras, tiempo ha que se hubieran arrepentido en cilicio y en ceniza.

    22 Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para Tiro y para Sidón, que para vosotras.

    23 Y tú, Capernaum, que eres levantada hasta el cielo, hasta el Hades serás abatida; porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en ti, habría permanecido hasta el día de hoy.

    24 Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma, que para ti.

    Unos serán azotados con pocos azotes, otros con muchos azotes (Lc. 12:47-48); de la misma manera que en el cielo habrá recompensas proporcionadas a la obra de cada uno (1 Co. 3:8). 

    Lucas 12:47-48

    47 Aquel siervo que conociendo la voluntad de su señor, no se preparó, ni hizo conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes.

    48 Mas el que sin conocerla hizo cosas dignas de azotes, será azotado poco; porque a todo aquel a quien se haya dado mucho, mucho se le demandará; y al que mucho se le haya confiado, más se le pedirá.

    1 Corintios 3:8

    8 Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor.

    (d) DURACIÓN. La duración del infierno. La Biblia asigna al castigo de los impíos una duración eterna. En heb., como en gr., se emplean los mismos términos para designar la vida eterna y el tormento eterno (Dn. 12:2; Mt. 25:46). 

    Daniel 12:2 

    2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

    Mateo 25:46

    46 E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.

    Se trata de un fuego que no se puede apagar, de un gusano que no muere (Mt. 3:12; Mr. 9:48). 

    Mateo 3:12 

    12 Su aventador está en su mano, y limpiará su era; y recogerá su trigo en el granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagará.

    Marcos 9:48

    48 donde el gusano de ellos no muere, y el fuego nunca se apaga.

    Ver también en otros pasajes el uso del término eterno, en gr. «aionios» (Mr. 3:29; 2 Ts. 1:9; He. 6:2; Jud. 6, 7, 13). 

    Marcos 3:29 

    29 pero cualquiera que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno.

    2 Tesalonicenses 1:9 

    9 los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder,

    Hebreos 6:2 

    2 de la doctrina de bautismos, de la imposición de manos, de la resurrección de los muertos y del juicio eterno.

    Judas 1:6, 7, 13

    6 Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día;

    7 como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno.

    13 fieras ondas del mar, que espuman su propia vergüenza; estrellas errantes, para las cuales está reservada eternamente la oscuridad de las tinieblas.

    Este término aparece 71 veces en el NT. Hay algunos que piensan que solamente significa «de gran duración, en relación con el siglo (aion) venidero». 

    Ahora bien, en 64 ocasiones eterno se aplica a las gloriosas realidades sin fin del otro mundo: Dios, el Espíritu, el Evangelio, la salvación, la redención, la herencia, la gloria, el reino, la vida eterna, etc. Y esta misma palabra se aplica 7 veces a la perdición. 

    ¿No debe por ello significar asimismo una realidad sin fin? Hemos visto que en Apocalipsis se afirma que el tormento se prolonga «por los siglos de los siglos» (Ap. 14:11; 19:3; 20:10). 

    Apocalipsis 14:11 

    11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.

    Apocalipsis 19:3 

    3 Otra vez dijeron: ¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos.

    Apocalipsis 20:10

    10 Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.

    Y también en el mismo libro este término califica 10 veces la duración de la existencia de Dios, de Su gloria, reino, y del reino de los elegidos en el cielo (Ap. 1:6, 18; 11:15; 22:5, etc.). 

    Apocalipsis 1:6, 18 

    6 y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.

    18 y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.

    Apocalipsis 11:15 

    La séptima trompeta

    15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos.

    Apocalipsis 22:5

    5 No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos.

    Ante tales declaraciones, quedamos profundamente afligidos. Además, no es posible dudar de la sabiduría, del amor, y de la justicia de Dios. Un día, en Su presencia, comprenderemos: «El juicio será vuelto a la justicia, y en pos de ella irán todos los rectos de corazón» (Sal. 94:15). 

    Salmos 94:15

    15 Sino que el juicio será vuelto a la justicia, Y en pos de ella irán todos los rectos de corazón.

    (e) ANIQUILACIÓN. ¿No serán aniquilados los impíos en el mundo venidero? No es esto lo que muestran las Escrituras, por cuanto su tormento no tiene fin. Sin embargo, los partidarios del «condicionalismo» afirman que, como Dios, «es el único que tiene inmortalidad» (1 Ti. 6:16). 

    1 Timoteo 6:16

    16 el único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver, al cual sea la honra y el imperio sempiterno. Amén.

    Él solamente la concede a aquellos que creen; a falta de lo cual dejarían de existir. Ahora bien, es cierto que sólo el Señor puede decir: «Yo soy la vida» y que conocerle a Él es la vida eterna (Jn. 14:6; 17:3); esta vida verdadera sólo es comunicada al creyente (Jn. 3:36; 1 Jn. 5:12). 

    Juan 14:6 

    6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

    Juan 17:3

    3 Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.

    Juan 3:36 

    36 El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.

    1 Juan 5:12

    12 El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida.

    Pero la Biblia enseña que la muerte espiritual, bien lejos de ser la ausencia de existencia, es la separación de Dios, y la privación de la única verdadera felicidad. 

    Adán y Eva fueron excluidos del Edén después de su caída en base a Gn. 2:17; el hijo pródigo estaba «muerto» en su alejamiento de su Padre (Lc. 15:24 cp 1 Ti. 5:6); los efesios lo habían estado en sus delitos y pecados (Ef 2:1,5). 

    Génesis 2:17

    17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.

    Lucas 15:24

    24 porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse.

    1 Timoteo 5:6

    6 Pero la que se entrega a los placeres, viviendo está muerta.

    Efesios 2:1,5

    Salvos por gracia

    1 Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,

    5 aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos),

    En cuanto a la muerte segunda que sigue al Juicio Final no es la aniquilación sino el lago de fuego, lugar de tormento eterno (Ap. 20:10; 21:8; 14:10-11). 

    Apocalipsis 20:10 

    10 Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.

    Apocalipsis 21:8 

    8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.

    Apocalipsis 14:10-11

    10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;

    11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.

    (f) TODOS SALVOS. ¿No serán todos salvados un día? Los universalistas insisten en las palabras «todos» en los siguientes textos: «Así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados... para que Dios sea todo en todos» (1 Co. 15:22, 28; cp. Fil. 2:10-11; Ro. 11:32; Col. 1:20). 

    1 Corintios 15:22, 28 

    22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.

    28 Pero luego que todas las cosas le estén sujetas, entonces también el Hijo mismo se sujetará al que le sujetó a él todas las cosas, para que Dios sea todo en todos.

    Filipenses 2:10-11 

    10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra;

    11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.

    Romanos 11:32 

    32 Porque Dios sujetó a todos en desobediencia, para tener misericordia de todos.

    Colosenses 1:20

    20 y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.

    Dicen ellos que el triunfo de Cristo no sería completo si tan sólo una criatura escapara de Su amor; un día, prosiguen, todos los pecadores, y el mismo diablo, serán salvos, después de haber sido purificados por el fuego del infierno (Stróter). 

    Los textos bíblicos dicen algo muy distinto. Pablo dice: «En Cristo todos serán vivificados... los que son de Cristo en Su venida» (1 Co. 15:23). 

    1 Corintios 15:23

    23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.

    En Cristo es la palabra clave. Los que están en Cristo son los creyentes (Ro. 6:5-11, 23; 8:1; cp. Ef. 2:10; Col. 3:11). 

    Romanos 6:5-11, 23 

    5 Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección;

    6 sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado.

    7 Porque el que ha muerto, ha sido justificado del pecado.

    8 Y si morimos con Cristo, creemos que también viviremos con él;

    9 sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de los muertos, ya no muere; la muerte no se enseñorea más de él.

    10 Porque en cuanto murió, al pecado murió una vez por todas; mas en cuanto vive, para Dios vive.

    11 Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro.

    23 Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

    Romanos 8:1

    Viviendo en el Espíritu

    1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

    Efesios 2:10 

    10 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.

    Colosenses 3:11

    11 donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que Cristo es el todo, y en todos.

    Es evidente que se está hablando de todos los creyentes. Toda rodilla se doblará un día ante el Señor; esto es, todos, incluyendo Sus enemigos, se le someterán. 

    Por otra parte, si los sufrimientos de un fuego purificador salvara las almas de los que han rechazado el evangelio aquí y ahora, su redención no tendría lugar por la sangre de Cristo. Y frente a esto cp. Sal. 49:8

    Salmos 49:8

    8 (Porque la redención de su vida es de gran precio, Y no se logrará jamás),

    (g) PURGATORIO. Doctrina católico romana del Purgatorio. El Purgatorio es una ficción del catolicismo romano. Todos los pasajes bíblicos que tratan del más allá no presentan más que dos destinos: el cielo y el infierno, el camino ancho de la perdición y la puerta estrecha de la vida (Mt. 7:13, 14), la cizaña arrojada al horno y el trigo metido en el granero celeste (Mt. 13:41-43, 49, 50), las vírgenes insensatas son dejadas afuera y las prudentes reciben entrada (Mt. 25:10, 11), el servidor infiel es echado a las tinieblas de fuera y el siervo fiel entra en el gozo de su señor (Mt. 13:21, 30), los malditos van al fuego al castigo eterno, los benditos a la vida eterna (Mt. 13:33-46), el rico malvado va a los tormentos sin poder de recibir ayuda alguna; y Lázaro va al seno de Abraham (Lc. 16:22- 23); hay la resurrección para vergüenza y condenación eterna, otra para vida eterna (Dn. 12:2; Jn. 5:29); los impíos son arrojados al lago de fuego y de azufre, y los elegidos entran en la Jerusalén celestial (Ap. 21:1-4, 8). 

    Mateo 7:13, 14

    La puerta estrecha

    13 Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella;

    14 porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.

    Mateo 13:41-43, 49, 50

    41 Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad,

    42 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    43 Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.

    49 Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán a los malos de entre los justos,

    50 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Mateo 25:10, 11

    10 Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta.

    11 Después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: ¡Señor, señor, ábrenos!

    Mateo 13:21, 30

    21 pero no tiene raíz en sí, sino que es de corta duración, pues al venir la aflicción o la persecución por causa de la palabra, luego tropieza.

    30 Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero.

    Mateo 13:33-46

    Parábola de la levadura

    33 Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.

    El uso que Jesús hace de las parábolas

    34 Todo esto habló Jesús por parábolas a la gente, y sin parábolas no les hablaba;

    35 para que se cumpliese lo dicho por el profeta, cuando dijo: Abriré en parábolas mi boca; Declararé cosas escondidas desde la fundación del mundo.

    Jesús explica la parábola de la cizaña

    36 Entonces, despedida la gente, entró Jesús en la casa; y acercándose a él sus discípulos, le dijeron: Explícanos la parábola de la cizaña del campo.

    37 Respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre.

    38 El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del malo.

    39 El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del siglo; y los segadores son los ángeles.

    40 De manera que como se arranca la cizaña, y se quema en el fuego, así será en el fin de este siglo.

    41 Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad,

    42 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    43 Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.

    El tesoro escondido

    44 Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.

    La perla de gran precio

    45 También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas,

    46 que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró.

    Lucas 16:22-23

    22 Aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado.

    23 Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno.

    Daniel 12:2 

    2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

    Juan 5:29

    29 y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.

    Apocalipsis 21:1-4, 8

    Cielo nuevo y tierra nueva

    1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.

    2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido.

    3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios.

    4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.

    8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.

    Cristo murió diciendo: «¡Consumado es!» (Jn. 19:30). 

    Juan 19:30

    30 Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu.

    El hombre es justificado «gratuitamente por Su gracia. ... por la fe sin las obras» (Ro. 3:23, 28). 

    Romanos 3:23, 28

    23 por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,

    28 Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley.

    No es, pues, el sufrimiento en un «purgatorio» lo que expía el pecado ya abolido por la cruz (He. 9:26; 10:10, 17- 18), y de los que solamente la sangre de Cristo nos purifica enteramente (1 Jn. 1:7, 9). 

    Hebreos 9:26 

    26 De otra manera le hubiera sido necesario padecer muchas veces desde el principio del mundo; pero ahora, en la consumación de los siglos, se presentó una vez para siempre por el sacrificio de sí mismo para quitar de en medio el pecado.

    Hebreos 10:10, 17-18

    10 En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre.

    17 añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones.

    18 Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.

    1 Juan 1:7, 9

    7 pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

    9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.

    (h) CÓMO ESCAPAR. Cómo escapar al infierno. Siendo que es tan horrendo el castigo en el mundo venidero, nuestro principal interés debiera ser evitarlo a todo precio. 

    Este es también el deseo de Dios para nosotros, y la condición que ha puesto para ello es de lo más simple. Él ha dado a Su Hijo unigénito, a fin de que todo aquel que crea en Él no se pierda (Jn. 3:16). 

    Juan 3:16

    De tal manera amó Dios al mundo

    16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

    Todo el que oye Su palabra y cree... tiene la vida eterna y no vendrá a condenación, sino que ha pasado de muerte a vida (Jn. 5:24). 

    Juan 5:24

    24 De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.

    «El que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente» (Ap. 22:17). 

    Apocalipsis 22:17

    17 Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.

    En suma, van al infierno los que así lo quieren, y van al cielo los que quieren. Un día, Cristo lloró sobre Jerusalén diciendo: «¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta a sus polluelos debajo de las alas, y no quisiste!» (Mt. 23:37). 

    Mateo 23:37

    Lamento de Jesús sobre Jerusalén

    37 ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus polluelos debajo de las alas, y no quisiste!

    Que sea de manera que jamás nos haga a nosotros tal reproche. 

    Bibliografía. 

    Anderson, Sir Robert: Human Destiny (Pickering and Inglis), Londres s/f; Darby, J. N.: «On Everlasting Punishment», The Bible Treasury, Dic. 1868; 

    Lacueva, F.: Escatología II (Clie, Terrassa, 1983); 

    Pache,R.: L’Au- Delá (Éditions Emmaús, Suiza); Pentecosts, J. D.: Eventos del Porvenir (Libertador, Maracaibo 1977).

  • DICCIONARIO
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  • Castigo eterno

    Esta expresión designa la suerte reservada a los no arrepentidos en el mundo venidero (Mt. 25:46). 

    Mateo 25:46

    46 E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.

    Un término más usado es «infierno» (del lat.: «inferior»); este término aparece en la versión Reina-Valera como traducción de «gehena». Infierno está inspirado en Ef. 4:9 (Cristo descendió a las partes más bajas de la tierra, esto es, la morada de los muertos). 

    Efesios 4:9

    9 Y eso de que subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra?

    No tenía en principio el sentido que se le da comúnmente, y que lo restringe al lugar de tormento, sino que tenía un significado equivalente a «Seol». 

    (a) DESCRIPCIÓN. ¿Dónde hallamos una descripción bíblica del castigo eterno? Entre muchos otros se pueden citar: La vergüenza y confusión perpetua (Dn. 12:2); el fuego de la «gehena» (Mt. 18:9); el fuego que no puede ser apagado (Mr. 9:43); el horno de fuego (Mt. 13:41-42); el lugar de lloro y del crujir de dientes (Mt. 22:13); las tinieblas de afuera (Mt. 8:12); el castigo del fuego eterno (Jud. 7); el lago de fuego (Ap. 20:15), etc. 

    Daniel 12:2

    2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

    Mateo 18:9

    9 Y si tu ojo te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti; mejor te es entrar con un solo ojo en la vida, que teniendo dos ojos ser echado en el infierno de fuego.

    Marcos 9:43

    43 Si tu mano te fuere ocasión de caer, córtala; mejor te es entrar en la vida manco, que teniendo dos manos ir al infierno, al fuego que no puede ser apagado,

    Mateo 13:41-42

    41 Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad,

    42 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Mateo 22:13

    13 Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Mateo 8:12

    12 mas los hijos del reino serán echados a las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Judas 1:7

    7 como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno.

    Apocalipsis 20:15

    15 Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.

    De todas estas expresiones se ve que el castigo eterno es una horrenda realidad. Cierto es que se emplean imágenes: fuego, tinieblas, gusanos, llanto, crujir de dientes, etc. 

    Las Escrituras nos hablan en un lenguaje humano para damos una idea del mundo venidero; pero la descripción que hallamos en ellas es totalmente distinta de las grotescas representaciones de la Edad Media. 

    La idea que domina a todos estos textos es que el castigo eterno consiste en la separación de Dios, con todas sus consecuencias: «Los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder.» Sin embargo, con respecto a las consecuencias de esta exclusión, se tiene que recordar que el castigo eterno caerá sobre la persona completa. 

    Los impíos sufrirán la pena del castigo eterno después de la resurrección de sus cuerpos, por lo que es erróneo insistir excesivamente en que las imágenes anteriores son meros símbolos. Y se tiene que recordar también que las imágenes, símbolos, etc., se usan para expresar una realidad más plena, no menos, que la que tienen los símbolos mismos. 

    Es evidente que las penas del alma serán espirituales; pero no es menos cierto que los impíos resucitados recibirán un castigo que, adecuado a su medida de responsabilidad, recaerá sobre la plenitud de su ser (Mt. 10:28). ¿Qué es la gehena? 

    Mateo 10:28

    28 Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno.

    Este término es la transcripción del término heb. «gé-Hinon», lugar maldito donde ciertos israelitas y sus reyes infieles habían quemado vivos a sus hijos e hijas en honor de Moloc (2 R. 23:10). 

    2 Reyes 23:10

    10 Asimismo profanó a Tofet, que está en el valle del hijo de Hinom, para que ninguno pasase su hijo o su hija por fuego a Moloc.

    Parece que en época de Cristo se quemaban allí las basuras de Jerusalén. Jesús empleó el término de «gehena» para hablar del fuego del infierno, de la manera que las Escrituras usan en el mismo sentido los términos de horno, de tinieblas, de azufre. 

    (b) SUFRIMIENTO. El sufrimiento del infierno. Los textos bíblicos insisten mucho sobre la ignominia, el tormento, el llanto, el crujir de dientes, la tribulación, la angustia, el sufrimiento que sufren los réprobos (Dn. 12:2; Lc. 16:23-24; Mt. 13:42; Ro. 2:8-9; Jud. 7). 

    Daniel 12:2 

    2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

    Lucas 16:23-24 

    23 Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno.

    24 Entonces él, dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua; porque estoy atormentado en esta llama.

    Mateo 13:42 

    42 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Romanos 2:8-9 

    8 pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia;

    9 tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, el judío primeramente y también el griego,

    Judas 1:7

    7 como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno.

    Y el apóstol Juan añade: «Y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche... y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos» (Ap. 14:10-11; 20:10). 

    Apocalipsis 14:10-11 

    10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;

    11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.

    Apocalipsis 20:10

    10 Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.

    ¿Cómo se pueden imaginar tales sufrimientos, y especialmente cómo se pueden conciliar con la concepción de un Dios de amor? Señalemos en primer lugar que la perdición será provocada precisamente por el rechazo del amor de Dios; por otra parte el Señor no habrá de hacer nada para atormentar a los que no quisieron Su salvación, a excepción de alejarlos de Sí (Mt. 25:41). 

    Mateo 25:41

    41 Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.

    ¿Acaso no dijo una vez a los israelitas que, por su incredulidad, habían rehusado entrar en la Tierra Prometida: «Y conoceréis lo que es estar privados de mi presencia»? (Nm. 14:34, Keil-Delitzsch). 

    Números 14:34

    34 Conforme al número de los días, de los cuarenta días en que reconocisteis la tierra, llevaréis vuestras iniquidades cuarenta años, un año por cada día; y conoceréis mi castigo.

    (c) CUANTÍA. El castigo será proporcional a la responsabilidad individual de cada cual. Dios no es injusto, y cada uno de los impíos será juzgado exactamente según sus obras (Ap. 20:12-13; Ec. 12:1, 16; Mt. 12:36; Ro. 2:16; Jud. 14-15). 

    Apocalipsis 20:12-13 

    12 Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.

    13 Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras.

    Mateo 12:36 

    36 Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio.

    Romanos 2:16 

    16 en el día en que Dios juzgará por Jesucristo los secretos de los hombres, conforme a mi evangelio.

    Judas 1:14-15

    14 De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el Señor con sus santas decenas de millares,

    15 para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de todas sus obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que los pecadores impíos han hablado contra él.

    La responsabilidad de los culpables será evaluada según la luz recibida, y los que han pecado sin la ley, sin la ley perecerán (Ro. 2:12). 

    Romanos 2:12

    12 Porque todos los que sin ley han pecado, sin ley también perecerán; y todos los que bajo la ley han pecado, por la ley serán juzgados;

    Las ciudades que rechazaron las enseñanzas de Cristo serán juzgadas con mucha mayor severidad que Sodoma y Gomorra (Mt. 10:14-15; 11:20-24). 

    Mateo 10:14-15 

    14 Y si alguno no os recibiere, ni oyere vuestras palabras, salid de aquella casa o ciudad, y sacudid el polvo de vuestros pies.

    15 De cierto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma y de Gomorra, que para aquella ciudad.

    Mateo 11:20-24

    20 Entonces comenzó a reconvenir a las ciudades en las cuales había hecho muchos de sus milagros, porque no se habían arrepentido, diciendo:

    21 Ay de ti, Corazín! Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en vosotras, tiempo ha que se hubieran arrepentido en cilicio y en ceniza.

    22 Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para Tiro y para Sidón, que para vosotras.

    23 Y tú, Capernaum, que eres levantada hasta el cielo, hasta el Hades serás abatida; porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en ti, habría permanecido hasta el día de hoy.

    24 Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma, que para ti.

    Unos serán azotados con pocos azotes, otros con muchos azotes (Lc. 12:47-48); de la misma manera que en el cielo habrá recompensas proporcionadas a la obra de cada uno (1 Co. 3:8). 

    Lucas 12:47-48

    47 Aquel siervo que conociendo la voluntad de su señor, no se preparó, ni hizo conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes.

    48 Mas el que sin conocerla hizo cosas dignas de azotes, será azotado poco; porque a todo aquel a quien se haya dado mucho, mucho se le demandará; y al que mucho se le haya confiado, más se le pedirá.

    1 Corintios 3:8

    8 Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor.

    (d) DURACIÓN. La duración del infierno. La Biblia asigna al castigo de los impíos una duración eterna. En heb., como en gr., se emplean los mismos términos para designar la vida eterna y el tormento eterno (Dn. 12:2; Mt. 25:46). 

    Daniel 12:2 

    2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

    Mateo 25:46

    46 E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.

    Se trata de un fuego que no se puede apagar, de un gusano que no muere (Mt. 3:12; Mr. 9:48). 

    Mateo 3:12 

    12 Su aventador está en su mano, y limpiará su era; y recogerá su trigo en el granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagará.

    Marcos 9:48

    48 donde el gusano de ellos no muere, y el fuego nunca se apaga.

    Ver también en otros pasajes el uso del término eterno, en gr. «aionios» (Mr. 3:29; 2 Ts. 1:9; He. 6:2; Jud. 6, 7, 13). 

    Marcos 3:29 

    29 pero cualquiera que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno.

    2 Tesalonicenses 1:9 

    9 los cuales sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder,

    Hebreos 6:2 

    2 de la doctrina de bautismos, de la imposición de manos, de la resurrección de los muertos y del juicio eterno.

    Judas 1:6, 7, 13

    6 Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día;

    7 como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno.

    13 fieras ondas del mar, que espuman su propia vergüenza; estrellas errantes, para las cuales está reservada eternamente la oscuridad de las tinieblas.

    Este término aparece 71 veces en el NT. Hay algunos que piensan que solamente significa «de gran duración, en relación con el siglo (aion) venidero». 

    Ahora bien, en 64 ocasiones eterno se aplica a las gloriosas realidades sin fin del otro mundo: Dios, el Espíritu, el Evangelio, la salvación, la redención, la herencia, la gloria, el reino, la vida eterna, etc. Y esta misma palabra se aplica 7 veces a la perdición. 

    ¿No debe por ello significar asimismo una realidad sin fin? Hemos visto que en Apocalipsis se afirma que el tormento se prolonga «por los siglos de los siglos» (Ap. 14:11; 19:3; 20:10). 

    Apocalipsis 14:11 

    11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.

    Apocalipsis 19:3 

    3 Otra vez dijeron: ¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos.

    Apocalipsis 20:10

    10 Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.

    Y también en el mismo libro este término califica 10 veces la duración de la existencia de Dios, de Su gloria, reino, y del reino de los elegidos en el cielo (Ap. 1:6, 18; 11:15; 22:5, etc.). 

    Apocalipsis 1:6, 18 

    6 y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.

    18 y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.

    Apocalipsis 11:15 

    La séptima trompeta

    15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos.

    Apocalipsis 22:5

    5 No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos.

    Ante tales declaraciones, quedamos profundamente afligidos. Además, no es posible dudar de la sabiduría, del amor, y de la justicia de Dios. Un día, en Su presencia, comprenderemos: «El juicio será vuelto a la justicia, y en pos de ella irán todos los rectos de corazón» (Sal. 94:15). 

    Salmos 94:15

    15 Sino que el juicio será vuelto a la justicia, Y en pos de ella irán todos los rectos de corazón.

    (e) ANIQUILACIÓN. ¿No serán aniquilados los impíos en el mundo venidero? No es esto lo que muestran las Escrituras, por cuanto su tormento no tiene fin. Sin embargo, los partidarios del «condicionalismo» afirman que, como Dios, «es el único que tiene inmortalidad» (1 Ti. 6:16). 

    1 Timoteo 6:16

    16 el único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver, al cual sea la honra y el imperio sempiterno. Amén.

    Él solamente la concede a aquellos que creen; a falta de lo cual dejarían de existir. Ahora bien, es cierto que sólo el Señor puede decir: «Yo soy la vida» y que conocerle a Él es la vida eterna (Jn. 14:6; 17:3); esta vida verdadera sólo es comunicada al creyente (Jn. 3:36; 1 Jn. 5:12). 

    Juan 14:6 

    6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

    Juan 17:3

    3 Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.

    Juan 3:36 

    36 El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.

    1 Juan 5:12

    12 El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida.

    Pero la Biblia enseña que la muerte espiritual, bien lejos de ser la ausencia de existencia, es la separación de Dios, y la privación de la única verdadera felicidad. 

    Adán y Eva fueron excluidos del Edén después de su caída en base a Gn. 2:17; el hijo pródigo estaba «muerto» en su alejamiento de su Padre (Lc. 15:24 cp 1 Ti. 5:6); los efesios lo habían estado en sus delitos y pecados (Ef 2:1,5). 

    Génesis 2:17

    17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.

    Lucas 15:24

    24 porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse.

    1 Timoteo 5:6

    6 Pero la que se entrega a los placeres, viviendo está muerta.

    Efesios 2:1,5

    Salvos por gracia

    1 Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,

    5 aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos),

    En cuanto a la muerte segunda que sigue al Juicio Final no es la aniquilación sino el lago de fuego, lugar de tormento eterno (Ap. 20:10; 21:8; 14:10-11). 

    Apocalipsis 20:10 

    10 Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.

    Apocalipsis 21:8 

    8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.

    Apocalipsis 14:10-11

    10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;

    11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.

    (f) TODOS SALVOS. ¿No serán todos salvados un día? Los universalistas insisten en las palabras «todos» en los siguientes textos: «Así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados... para que Dios sea todo en todos» (1 Co. 15:22, 28; cp. Fil. 2:10-11; Ro. 11:32; Col. 1:20). 

    1 Corintios 15:22, 28 

    22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.

    28 Pero luego que todas las cosas le estén sujetas, entonces también el Hijo mismo se sujetará al que le sujetó a él todas las cosas, para que Dios sea todo en todos.

    Filipenses 2:10-11 

    10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra;

    11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.

    Romanos 11:32 

    32 Porque Dios sujetó a todos en desobediencia, para tener misericordia de todos.

    Colosenses 1:20

    20 y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.

    Dicen ellos que el triunfo de Cristo no sería completo si tan sólo una criatura escapara de Su amor; un día, prosiguen, todos los pecadores, y el mismo diablo, serán salvos, después de haber sido purificados por el fuego del infierno (Stróter). 

    Los textos bíblicos dicen algo muy distinto. Pablo dice: «En Cristo todos serán vivificados... los que son de Cristo en Su venida» (1 Co. 15:23). 

    1 Corintios 15:23

    23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.

    En Cristo es la palabra clave. Los que están en Cristo son los creyentes (Ro. 6:5-11, 23; 8:1; cp. Ef. 2:10; Col. 3:11). 

    Romanos 6:5-11, 23 

    5 Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección;

    6 sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado.

    7 Porque el que ha muerto, ha sido justificado del pecado.

    8 Y si morimos con Cristo, creemos que también viviremos con él;

    9 sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de los muertos, ya no muere; la muerte no se enseñorea más de él.

    10 Porque en cuanto murió, al pecado murió una vez por todas; mas en cuanto vive, para Dios vive.

    11 Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro.

    23 Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

    Romanos 8:1

    Viviendo en el Espíritu

    1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

    Efesios 2:10 

    10 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.

    Colosenses 3:11

    11 donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que Cristo es el todo, y en todos.

    Es evidente que se está hablando de todos los creyentes. Toda rodilla se doblará un día ante el Señor; esto es, todos, incluyendo Sus enemigos, se le someterán. 

    Por otra parte, si los sufrimientos de un fuego purificador salvara las almas de los que han rechazado el evangelio aquí y ahora, su redención no tendría lugar por la sangre de Cristo. Y frente a esto cp. Sal. 49:8

    Salmos 49:8

    8 (Porque la redención de su vida es de gran precio, Y no se logrará jamás),

    (g) PURGATORIO. Doctrina católico romana del Purgatorio. El Purgatorio es una ficción del catolicismo romano. Todos los pasajes bíblicos que tratan del más allá no presentan más que dos destinos: el cielo y el infierno, el camino ancho de la perdición y la puerta estrecha de la vida (Mt. 7:13, 14), la cizaña arrojada al horno y el trigo metido en el granero celeste (Mt. 13:41-43, 49, 50), las vírgenes insensatas son dejadas afuera y las prudentes reciben entrada (Mt. 25:10, 11), el servidor infiel es echado a las tinieblas de fuera y el siervo fiel entra en el gozo de su señor (Mt. 13:21, 30), los malditos van al fuego al castigo eterno, los benditos a la vida eterna (Mt. 13:33-46), el rico malvado va a los tormentos sin poder de recibir ayuda alguna; y Lázaro va al seno de Abraham (Lc. 16:22- 23); hay la resurrección para vergüenza y condenación eterna, otra para vida eterna (Dn. 12:2; Jn. 5:29); los impíos son arrojados al lago de fuego y de azufre, y los elegidos entran en la Jerusalén celestial (Ap. 21:1-4, 8). 

    Mateo 7:13, 14

    La puerta estrecha

    13 Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella;

    14 porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.

    Mateo 13:41-43, 49, 50

    41 Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad,

    42 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    43 Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.

    49 Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán a los malos de entre los justos,

    50 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    Mateo 25:10, 11

    10 Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta.

    11 Después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: ¡Señor, señor, ábrenos!

    Mateo 13:21, 30

    21 pero no tiene raíz en sí, sino que es de corta duración, pues al venir la aflicción o la persecución por causa de la palabra, luego tropieza.

    30 Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero.

    Mateo 13:33-46

    Parábola de la levadura

    33 Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.

    El uso que Jesús hace de las parábolas

    34 Todo esto habló Jesús por parábolas a la gente, y sin parábolas no les hablaba;

    35 para que se cumpliese lo dicho por el profeta, cuando dijo: Abriré en parábolas mi boca; Declararé cosas escondidas desde la fundación del mundo.

    Jesús explica la parábola de la cizaña

    36 Entonces, despedida la gente, entró Jesús en la casa; y acercándose a él sus discípulos, le dijeron: Explícanos la parábola de la cizaña del campo.

    37 Respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre.

    38 El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del malo.

    39 El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del siglo; y los segadores son los ángeles.

    40 De manera que como se arranca la cizaña, y se quema en el fuego, así será en el fin de este siglo.

    41 Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad,

    42 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

    43 Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.

    El tesoro escondido

    44 Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.

    La perla de gran precio

    45 También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas,

    46 que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró.

    Lucas 16:22-23

    22 Aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado.

    23 Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno.

    Daniel 12:2 

    2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

    Juan 5:29

    29 y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.

    Apocalipsis 21:1-4, 8

    Cielo nuevo y tierra nueva

    1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.

    2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido.

    3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios.

    4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.

    8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.

    Cristo murió diciendo: «¡Consumado es!» (Jn. 19:30). 

    Juan 19:30

    30 Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu.

    El hombre es justificado «gratuitamente por Su gracia. ... por la fe sin las obras» (Ro. 3:23, 28). 

    Romanos 3:23, 28

    23 por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,

    28 Concluimos, pues, que el hombre es justificado por fe sin las obras de la ley.

    No es, pues, el sufrimiento en un «purgatorio» lo que expía el pecado ya abolido por la cruz (He. 9:26; 10:10, 17- 18), y de los que solamente la sangre de Cristo nos purifica enteramente (1 Jn. 1:7, 9). 

    Hebreos 9:26 

    26 De otra manera le hubiera sido necesario padecer muchas veces desde el principio del mundo; pero ahora, en la consumación de los siglos, se presentó una vez para siempre por el sacrificio de sí mismo para quitar de en medio el pecado.

    Hebreos 10:10, 17-18

    10 En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre.

    17 añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones.

    18 Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.

    1 Juan 1:7, 9

    7 pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

    9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.

    (h) CÓMO ESCAPAR. Cómo escapar al infierno. Siendo que es tan horrendo el castigo en el mundo venidero, nuestro principal interés debiera ser evitarlo a todo precio. 

    Este es también el deseo de Dios para nosotros, y la condición que ha puesto para ello es de lo más simple. Él ha dado a Su Hijo unigénito, a fin de que todo aquel que crea en Él no se pierda (Jn. 3:16). 

    Juan 3:16

    De tal manera amó Dios al mundo

    16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

    Todo el que oye Su palabra y cree... tiene la vida eterna y no vendrá a condenación, sino que ha pasado de muerte a vida (Jn. 5:24). 

    Juan 5:24

    24 De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.

    «El que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente» (Ap. 22:17). 

    Apocalipsis 22:17

    17 Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.

    En suma, van al infierno los que así lo quieren, y van al cielo los que quieren. Un día, Cristo lloró sobre Jerusalén diciendo: «¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta a sus polluelos debajo de las alas, y no quisiste!» (Mt. 23:37). 

    Mateo 23:37

    Lamento de Jesús sobre Jerusalén

    37 ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina junta sus polluelos debajo de las alas, y no quisiste!

    Que sea de manera que jamás nos haga a nosotros tal reproche. 

    Bibliografía. 

    Anderson, Sir Robert: Human Destiny (Pickering and Inglis), Londres s/f; Darby, J. N.: «On Everlasting Punishment», The Bible Treasury, Dic. 1868; 

    Lacueva, F.: Escatología II (Clie, Terrassa, 1983); 

    Pache,R.: L’Au- Delá (Éditions Emmaús, Suiza); Pentecosts, J. D.: Eventos del Porvenir (Libertador, Maracaibo 1977).

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