Diccionario
Diccionario
  • Amalec
    Descendientes de Esaú (Gn. 36:12).

    Génesis 36:12

    12 Y Timna fue concubina de Elifaz hijo de Esaú, y ella le dio a luz a Amalec; estos son los hijos de Ada, mujer de Esaú.

    Moraron durante mucho tiempo en las cercanías de Cades-barnea.

    Se hallaban por estos parajes en la época del éxodo (Nm. 13:29; 14:25).

    Números 13:29

    29 Amalec habita el Neguev, y el heteo, el jebuseo y el amorreo habitan en el monte, y el cananeo habita junto al mar, y a la ribera del Jordán.

    Números 14:25

    25 Ahora bien, el amalecita y el cananeo habitan en el valle; volveos mañana y salid al desierto, camino del Mar Rojo.

    Desde las cumbres de los montes de Abarim se podía ver el territorio que habitaban (Nm. 24:20; Dt. 34:1-3).

    Números 24:20

    20 Y viendo a Amalec, tomó su parábola y dijo: Amalec, cabeza de naciones; Mas al fin perecerá para siempre.

    Deuteronomio 34:1-3

    Muerte y sepultura de Moisés

    1 Subió Moisés de los campos de Moab al monte Nebo, a la cumbre del Pisga, que está enfrente de Jericó; y le mostró Jehová toda la tierra de Galaad hasta Dan,

    2 todo Neftalí, y la tierra de Efraín y de Manasés, toda la tierra de Judá hasta el mar occidental;

    3 el Neguev, y la llanura, la vega de Jericó, ciudad de las palmeras, hasta Zoar.

    En su época jugaron un importante papel (Nm. 24:20).

    Números 24:20

    20 Y viendo a Amalec, tomó su parábola y dijo: Amalec, cabeza de naciones; Mas al fin perecerá para siempre.

    Un redactor posterior al éxodo, relatando los acontecimientos sobrevenidos en este país, podía referirse a él como «el país de los amalecitas».

    El relato de la incursión de Quedorlaomer y de sus aliados habla de los invasores del oriente, que «vinieron... a Cades y devastaron... » no a los amalecitas, sino «por todo el país de los amalecitas» (Gn. 17:7), esto es, el país que el lector podía identificar en su época con el de los amalecitas.

    Génesis 17:7

    7 Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti.

    No se afirma aquí, pues, que los amalecitas existieran en la época anterior, sino que aquel país, ahora de los amalecitas, fue devastado.

    La expresión es voluntariamente imprecisa. Desde su centro, cercano a Cades, estos nómadas se dedicaban a lanzar incursiones y a saquear.

    Los amalecitas atacaron la retaguardia de los israelitas, que salían de Egipto y entraban en el desierto.

    En Refidim, al oeste del Sinaí, lucharon contra los israelitas, y fueron vencidos. A causa de ello, Israel recibió la orden de destruirlos completamente (Éx. 17:8-16; Dt. 25:17-19).

    Éxodo 17:8-16

    Guerra con Amalec

    8 Entonces vino Amalec y peleó contra Israel en Refidim.

    9 Y dijo Moisés a Josué: Escógenos varones, y sal a pelear contra Amalec; mañana yo estaré sobre la cumbre del collado, y la vara de Dios en mi mano.

    10 E hizo Josué como le dijo Moisés, peleando contra Amalec; y Moisés y Aarón y Hur subieron a la cumbre del collado.

    11 Y sucedía que cuando alzaba Moisés su mano, Israel prevalecía; mas cuando él bajaba su mano, prevalecía Amalec.

    12 Y las manos de Moisés se cansaban; por lo que tomaron una piedra, y la pusieron debajo de él, y se sentó sobre ella; y Aarón y Hur sostenían sus manos, el uno de un lado y el otro de otro; así hubo en sus manos firmeza hasta que se puso el sol.

    13 Y Josué deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada.

    14 Y Jehová dijo a Moisés: Escribe esto para memoria en un libro, y di a Josué que raeré del todo la memoria de Amalec de debajo del cielo.

    15 Y Moisés edificó un altar, y llamó su nombre Jehová- nisi;

    16 y dijo: Por cuanto la mano de Amalec se levantó contra el trono de Jehová, Jehová tendrá guerra con Amalec de generación en generación.

    Deuteronomio 25:17-19

    Orden de exterminar a Amalec

    17 Acuérdate de lo que hizo Amalec contigo en el camino, cuando salías de Egipto;

    18 de cómo te salió al encuentro en el camino, y te desbarató la retaguardia de todos los débiles que iban detrás de ti, cuando tú estabas cansado y trabajado; y no tuvo ningún temor de Dios.

    19 Por tanto, cuando Jehová tu Dios te dé descanso de todos tus enemigos alrededor, en la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad para que la poseas, borrarás la memoria de Amalec de debajo del cielo; no lo olvides.

    Un año después, Israel llegó a Cades y, desobedeciendo a Dios, intentó penetrar en Canaán.

    Los amalecitas se opusieron y los rechazaron (Nm. 14:43-45).

    Números 14:43-45

    43 Porque el amalecita y el cananeo están allí delante de vosotros, y caeréis a espada; pues por cuanto os habéis negado a seguir a Jehová, por eso no estará Jehová con vosotros.

    44 Sin embargo, se obstinaron en subir a la cima del monte; pero el arca del pacto de Jehová, y Moisés, no se apartaron de en medio del campamento.

    45 Y descendieron el amalecita y el cananeo que habitaban en aquel monte, y los hirieron y los derrotaron, persiguiéndolos hasta Horma.

    Es posible que fuera en esta época, o más tarde, que se dio el nombre de los amalecitas a una región montañosa de Efraín (Jue. 12:15; cp. Jue. 5:14).

    Jueces 12:15

    15 Y murió Abdón hijo de Hilel piratonita, y fue sepultado en Piratón, en la tierra de Efraín, en el monte de Amalec.

    Jueces 5:14

    14 De Efraín vinieron los radicados en Amalec, En pos de ti, Benjamín, entre tus pueblos; De Maquir descendieron príncipes, Y de Zabulón los que tenían vara de mando.

    Poco después de la época de Moisés y de Josué, dieron ayuda a Eglón, rey de Moab, para arrebatar Jericó a los israelitas.

    Algunas generaciones después, se unieron a los madianitas para oprimir a los israelitas del norte (Jue. 3:13; 6:3, 33).

    Jueces 3:13

    13 Este juntó consigo a los hijos de Amón y de Amalec, y vino e hirió a Israel, y tomó la ciudad de las palmeras.

    Jueces 6:3, 33

    3 Pues sucedía que cuando Israel había sembrado, subían los madianitas y amalecitas y los hijos del oriente contra ellos; subían y los atacaban.

    33 Pero todos los madianitas y amalecitas y los del oriente se juntaron a una, y pasando acamparon en el valle de Jezreel.

    Es evidente que se abrieron camino hacia el oriente, manteniendo relaciones amistosas con los otros moradores del desierto.

    Al final de la época de los Jueces, el rey Saúl aplastó totalmente su poderío (1 S. 15:33; 1 Cr. 4:43).

    1 Samuel 15:33

    33 Y Samuel dijo: Como tu espada dejó a las mujeres sin hijos, así tu madre será sin hijo entre las mujeres. Entonces Samuel cortó en pedazos a Agag delante de Jehová en Gilgal.

    1 Crónicas 4:43

    43 y destruyeron a los que habían quedado de Amalec, y habitaron allí hasta hoy.

    Cuidadosos estudios de las evidencias históricas, arqueológicas y etnográficas identifican a los amalecitas con los hiksos. (Ver EGIPTO)

    Bibliografía:

    Donovan Courville: «The Exodus Problem and its Ramifications», Challenge Books, Loma Linda, California, 1971;

    Immanuel Velikovsky: «Ages in Chaos», Doubleday, N.Y., 1952.

    VÉASE: Egipto
  • DICCIONARIO
Comparte este sitio
  • Amalec
    Descendientes de Esaú (Gn. 36:12).

    Génesis 36:12

    12 Y Timna fue concubina de Elifaz hijo de Esaú, y ella le dio a luz a Amalec; estos son los hijos de Ada, mujer de Esaú.

    Moraron durante mucho tiempo en las cercanías de Cades-barnea.

    Se hallaban por estos parajes en la época del éxodo (Nm. 13:29; 14:25).

    Números 13:29

    29 Amalec habita el Neguev, y el heteo, el jebuseo y el amorreo habitan en el monte, y el cananeo habita junto al mar, y a la ribera del Jordán.

    Números 14:25

    25 Ahora bien, el amalecita y el cananeo habitan en el valle; volveos mañana y salid al desierto, camino del Mar Rojo.

    Desde las cumbres de los montes de Abarim se podía ver el territorio que habitaban (Nm. 24:20; Dt. 34:1-3).

    Números 24:20

    20 Y viendo a Amalec, tomó su parábola y dijo: Amalec, cabeza de naciones; Mas al fin perecerá para siempre.

    Deuteronomio 34:1-3

    Muerte y sepultura de Moisés

    1 Subió Moisés de los campos de Moab al monte Nebo, a la cumbre del Pisga, que está enfrente de Jericó; y le mostró Jehová toda la tierra de Galaad hasta Dan,

    2 todo Neftalí, y la tierra de Efraín y de Manasés, toda la tierra de Judá hasta el mar occidental;

    3 el Neguev, y la llanura, la vega de Jericó, ciudad de las palmeras, hasta Zoar.

    En su época jugaron un importante papel (Nm. 24:20).

    Números 24:20

    20 Y viendo a Amalec, tomó su parábola y dijo: Amalec, cabeza de naciones; Mas al fin perecerá para siempre.

    Un redactor posterior al éxodo, relatando los acontecimientos sobrevenidos en este país, podía referirse a él como «el país de los amalecitas».

    El relato de la incursión de Quedorlaomer y de sus aliados habla de los invasores del oriente, que «vinieron... a Cades y devastaron... » no a los amalecitas, sino «por todo el país de los amalecitas» (Gn. 17:7), esto es, el país que el lector podía identificar en su época con el de los amalecitas.

    Génesis 17:7

    7 Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti.

    No se afirma aquí, pues, que los amalecitas existieran en la época anterior, sino que aquel país, ahora de los amalecitas, fue devastado.

    La expresión es voluntariamente imprecisa. Desde su centro, cercano a Cades, estos nómadas se dedicaban a lanzar incursiones y a saquear.

    Los amalecitas atacaron la retaguardia de los israelitas, que salían de Egipto y entraban en el desierto.

    En Refidim, al oeste del Sinaí, lucharon contra los israelitas, y fueron vencidos. A causa de ello, Israel recibió la orden de destruirlos completamente (Éx. 17:8-16; Dt. 25:17-19).

    Éxodo 17:8-16

    Guerra con Amalec

    8 Entonces vino Amalec y peleó contra Israel en Refidim.

    9 Y dijo Moisés a Josué: Escógenos varones, y sal a pelear contra Amalec; mañana yo estaré sobre la cumbre del collado, y la vara de Dios en mi mano.

    10 E hizo Josué como le dijo Moisés, peleando contra Amalec; y Moisés y Aarón y Hur subieron a la cumbre del collado.

    11 Y sucedía que cuando alzaba Moisés su mano, Israel prevalecía; mas cuando él bajaba su mano, prevalecía Amalec.

    12 Y las manos de Moisés se cansaban; por lo que tomaron una piedra, y la pusieron debajo de él, y se sentó sobre ella; y Aarón y Hur sostenían sus manos, el uno de un lado y el otro de otro; así hubo en sus manos firmeza hasta que se puso el sol.

    13 Y Josué deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada.

    14 Y Jehová dijo a Moisés: Escribe esto para memoria en un libro, y di a Josué que raeré del todo la memoria de Amalec de debajo del cielo.

    15 Y Moisés edificó un altar, y llamó su nombre Jehová- nisi;

    16 y dijo: Por cuanto la mano de Amalec se levantó contra el trono de Jehová, Jehová tendrá guerra con Amalec de generación en generación.

    Deuteronomio 25:17-19

    Orden de exterminar a Amalec

    17 Acuérdate de lo que hizo Amalec contigo en el camino, cuando salías de Egipto;

    18 de cómo te salió al encuentro en el camino, y te desbarató la retaguardia de todos los débiles que iban detrás de ti, cuando tú estabas cansado y trabajado; y no tuvo ningún temor de Dios.

    19 Por tanto, cuando Jehová tu Dios te dé descanso de todos tus enemigos alrededor, en la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad para que la poseas, borrarás la memoria de Amalec de debajo del cielo; no lo olvides.

    Un año después, Israel llegó a Cades y, desobedeciendo a Dios, intentó penetrar en Canaán.

    Los amalecitas se opusieron y los rechazaron (Nm. 14:43-45).

    Números 14:43-45

    43 Porque el amalecita y el cananeo están allí delante de vosotros, y caeréis a espada; pues por cuanto os habéis negado a seguir a Jehová, por eso no estará Jehová con vosotros.

    44 Sin embargo, se obstinaron en subir a la cima del monte; pero el arca del pacto de Jehová, y Moisés, no se apartaron de en medio del campamento.

    45 Y descendieron el amalecita y el cananeo que habitaban en aquel monte, y los hirieron y los derrotaron, persiguiéndolos hasta Horma.

    Es posible que fuera en esta época, o más tarde, que se dio el nombre de los amalecitas a una región montañosa de Efraín (Jue. 12:15; cp. Jue. 5:14).

    Jueces 12:15

    15 Y murió Abdón hijo de Hilel piratonita, y fue sepultado en Piratón, en la tierra de Efraín, en el monte de Amalec.

    Jueces 5:14

    14 De Efraín vinieron los radicados en Amalec, En pos de ti, Benjamín, entre tus pueblos; De Maquir descendieron príncipes, Y de Zabulón los que tenían vara de mando.

    Poco después de la época de Moisés y de Josué, dieron ayuda a Eglón, rey de Moab, para arrebatar Jericó a los israelitas.

    Algunas generaciones después, se unieron a los madianitas para oprimir a los israelitas del norte (Jue. 3:13; 6:3, 33).

    Jueces 3:13

    13 Este juntó consigo a los hijos de Amón y de Amalec, y vino e hirió a Israel, y tomó la ciudad de las palmeras.

    Jueces 6:3, 33

    3 Pues sucedía que cuando Israel había sembrado, subían los madianitas y amalecitas y los hijos del oriente contra ellos; subían y los atacaban.

    33 Pero todos los madianitas y amalecitas y los del oriente se juntaron a una, y pasando acamparon en el valle de Jezreel.

    Es evidente que se abrieron camino hacia el oriente, manteniendo relaciones amistosas con los otros moradores del desierto.

    Al final de la época de los Jueces, el rey Saúl aplastó totalmente su poderío (1 S. 15:33; 1 Cr. 4:43).

    1 Samuel 15:33

    33 Y Samuel dijo: Como tu espada dejó a las mujeres sin hijos, así tu madre será sin hijo entre las mujeres. Entonces Samuel cortó en pedazos a Agag delante de Jehová en Gilgal.

    1 Crónicas 4:43

    43 y destruyeron a los que habían quedado de Amalec, y habitaron allí hasta hoy.

    Cuidadosos estudios de las evidencias históricas, arqueológicas y etnográficas identifican a los amalecitas con los hiksos. (Ver EGIPTO)

    Bibliografía:

    Donovan Courville: «The Exodus Problem and its Ramifications», Challenge Books, Loma Linda, California, 1971;

    Immanuel Velikovsky: «Ages in Chaos», Doubleday, N.Y., 1952.

    VÉASE:
    Egipto
Comparte este sitio
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información y limitar el uso de cookies en nuestra política de cookies.